A pesar de este alivio momentáneo, los datos comparativos revelan que ambos carburantes continúan siendo más costosos que hace un año, así como en comparación con el inicio del conflicto bélico en Ucrania. La gasolina, por ejemplo, se mantiene un 5,4% más cara que hace un año, con un precio medio esta semana de 1,685 euros por litro, representando un ligero descenso del 0,12% con respecto a la semana anterior. Por su parte, el diésel se sitúa un 6,8% por encima de los precios del año anterior, con un valor medio de 1,531 euros por litro, reflejando una reducción del 0,71% en comparación con la última referencia.

Llenar el depósito de un vehículo con 55 litros de gasolina ahora supone un gasto de 92,68 euros, 11 céntimos menos que la semana previa, mientras que el mismo volumen de diésel conlleva un desembolso de 84,21 euros, siendo 60 céntimos más barato que en la última referencia.

A pesar de estos descensos

El importe medio de los carburantes en España sigue siendo inferior a la media de la zona euro. El litro de gasolina se ha fijado en 1,85 euros en la zona euro, mientras que en España se sitúa en 1,685 euros. Similarmente, el precio del gasoil en la zona euro es de 1,672 euros por litro, mientras que en España es ligeramente más bajo, con un valor medio de 1,531 euros.

A nivel de la Unión Europea, tanto el precio de la gasolina como el del gasoil en España se encuentran por debajo de la media, que se sitúa en 1,796 euros por litro para la gasolina y 1,647 euros por litro para el gasoil.

Este ligero alivio en el precio de los carburantes podría representar un respiro para los conductores españoles, aunque la situación continúa siendo vigilada de cerca en medio de las fluctuaciones del mercado internacional y las tensiones geopolíticas que afectan al precio del petróleo.