La cantante británica Adele se ha alzado como triunfadora de la 54 edición de los Grammy celebrada en Los Angeles, ciudad donde este sábado fue hallada muerta la diva del soul Whitney Houston.

Los grandes premios de la música se convirtieron en un emotivo homenaje a la artista, fallecida a los 48 años de edad. El cantante LLCool J, presentador de la gala, comenzó la noche pidiendo una oración por «nuestra hermana». A continuación, Jennifer Hudson rindió tributo a Whitney interpretando «I will always love you», la canción que supuso el éxito mundial de la estrella de New Jersey.

Otra mujer, Adele, fue la gran protagonista de la noche. La británica, de 23 años, se llevó los seis galardones a los que había sido nominada: mejor álbum del año y mejor disco pop por 21; mejor canción y mejor grabación por su tema «Rolling in the Deep»; mejor interpretación pop por «Someone Like You» y mejor vídeo musical por «Rolling in the Deep».

«Esto es ridículo», dijo una incrédula Adele durante la gala, que supuso su vuelta a los escenarios tras su operación de garganta en el mes de noviembre. Tras superar los nervios iniciales, la joven hizo una majestuosa interpretación de su hit «Rolling in the Deep», demostrando que su voz sigue en forma y cosechando el mayor aplauso de la noche.

«Tengo que dar las gracias a mis médicos, que me devolvieron la voz», señaló Adele, quien describió 21 como un disco inspirado en una «relación basura» que, sin embargo, la llevó al año que le ha cambiado la vida.