«No hay más que unas desinversiones autorizadas por el Consejo de Ministros que presidía el señor Zapatero relativas a participaciones de SEPI en tres empresas cotizadas. Tenemos en este momento suspendidas estas autorizaciones y no es nuestra intención abordar esas desinversiones», afirmó Aguirre.

En abril del año pasado, el anterior Ejecutivo aprobó la venta del 2,71% de SEPI en la sociedad fruto de la fusión entre Iberia y British Airways, así como el 8,65% en Ebro Foods y la mitad de su 20% en REE. Las condiciones de mercado impidieron que las desinversiones pudieran acometerse.

Durante su toma de posesión en el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas, Aguirre aludió además a su «vocación de poner en valor las empresas del sector empresarial público» y citó la «austeridad» como una de sus principales líneas de gestión.

En alusión a REE, aseguró que cualquier cambio en la presidencia deberá ser aprobado por la junta de accionistas y que, en todo caso, el relevo de Luis Atienza será previsiblemente un «reflejo espejo» del que permitió al propio Atienza sustituir en su momento a Pedro Mielgo al frente del gestor técnico de la red eléctrica.

A la toma de posesión de Aguirre acudieron el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro; la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sánez de Santamaría, y la presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, a quien el nuevo presidente de la SEPI le transmitió su compromiso con esta región.

Aguirre aseguró además que la nueva SEPI buscará «en el futuro más inmediato» la creación de un «marco de estabilidad financiera» y un «saneamiento por vía de la austeridad». Los ajustes se harán de forma financiera y se intentará que no afecten a la plantilla, afirmó.

Además, aseguró que la SEPI acometerá «en breve» un ajuste y «simplificación» en las filiales de la sociedad, a las que tenderá a integrar en sus matrices correspondientes. El ‘holding’ ha detectado un «exceso de filiales» simplificará y reducirá «consejeros y consejos de administración», dijo.

La sociedad procurará «no hacer ninguna petición de recursos públicos», señaló Aguirre, quien además dijo que a su equipo «no le gustan las formas de gestión anteriormente aplicadas». «Creemos que se pierden muchas sinergias y muchos recursos que podrían ser utilizados de manera mucho mas eficaz», aseveró.

Además, aseguró que antes de se llegada la SEPI firmó algunos contratos «lesivos para el erario público» en los que el nuevo equipo gestor evitará incurrir y, al ser preguntado acerca de posibles bajadas de sueldo, expresó su deseo de «no adelantarse a anuncios» que corresponde a otros órganos del Estado.