Una asamblea en la que participaron unos dos mil trabajadores de autobuses de Barcelona celebrada la noche del domingo decidió desconvocar los cuatro días de paro que tenían que empezar el lunes coincidiendo con la celebración del congreso mundial de móviles. Esta desconvocatoria es consecuencia indirecta al referéndum que los trabajadores del metro, en la que el sábado decidieron mayoritariamente desconvocar la huelga que también tenían convocados.

Ante la posibilidad de que los autobuseros se quedaran solos en la convocatoria del paro, el comité de empresa convocó de urgencia una asamblea en la que participaron unos dos mil de los cuatro mil trabajadores de los autobuses. La asamblea fue tensa, pero al final decidieron instar al comité a seguir negociando con la dirección dado que no les satisface la última propuesta de la empresa, pero decidieron en una votación a mano alzada no realizar la huelga.

De esta manera se salva el transporte de los más de sesenta mil congresistas que se inicia este lunes en Barcelona y en el que la ciudad espera que dejen cerca de 300 millones. De momento todos los hoteles de Barcelona y cercanías han colgado el cartel de “completo”.