La cifra de negocio creció un 17,2% el pasado año, hasta sumar 1.637,33 millones de euros, mientras que el beneficio bruto de explotación (Ebitda) se situó en 1.215,22 millones, un 21,3% más.

REE explicó que alrededor de la mitad de este incremento se debe a la adquisición de activos de transporte, mientras que el resto corresponde principalmente a la remuneración asociada a las nuevas instalaciones puestas en servicio.

Durante el ejercicio 2011, la compañía invirtió un total de 844,3 millones de euros, que en su mayor parte (818,9 millones) se destinaron al desarrollo de la red de transporte nacional. De su lado, la deuda financiera neta del grupo se situó en 4.692,9 millones de euros al cierre del ejercicio, lo que conlleva una reducción del 1,3% respecto a 2010.

REE repartirá el próximo 2 de julio un dividendo bruto de 1,536 euros por acción, complementario al ya repartido a cuenta el pasado 2 de enero.

De esta forma, la retribución total al accionista correspondiente al ejercicio 2011 se situará en 2,2124 euros por título, importe que supera en un 18% al de 1,8751 euros por acción distribuido a cuenta de 2010.