Repsol se apunta a pagar el dividendo con acciones

29/02/2012

T. Juanes. No ha sido un año excelente y en el actual existen nubarrones. No obstante, Repsol ha mantenido el nivel de beneficios en 2011, si no se tiene en cuenta los extraordinarios del año precedente. Además busca fórmulas para remunerar a los accionistas sin pone en peligro su plan estratégico.

No es la primera del Ibex ni del sector energético. En esta etapa de crisis, Repsol se ha unido al grupo de compañías que dan al accionista la posibilidad de cobrar el dividendo con acciones. No obstante, también les queda la posibilidad de recibir la retribución en efectivo. Ha sido uno de los temas revelados por Miguel Martínez, director financiero de la petrolera, a los analistas tras la presentación de los resultados de 2011. Para materializar esta fórmula, la petrolera podría recurrir a los 61 millones de títulos que  mantiene en autocartera tras adquirirlos a Sacyr Vallehermoso. Ampliar capital, otra posibilidad, se traduce en una devaluación de los títulos.

El dividendo ha sido una de las principales batallas en el consejo del grupo que preside Antonio Brufau desde hace varios años. Sacyr, que llegó a controlar el 20% del capital de la petrolera cuando estaba presidida por Luis de Rivero, instó a subir la remuneración a sus socios, incluso en los ejercicios más marcados por la crisis. Era una opción que ponía en peligro la materialización del plan estratégico, cuyos objetivos básicos se centran en la ampliación de las reservas de gas y petróleo y en la modernización de sus activos de refino. Ahora, cuando Sacyr ya no es el «enemigo» de Repsol, la compañía puede decantarse por un sistema de retribución más acorde con sus intereses. No obstante, el dividendo total con cargo a los resultados del pasado año se elevará a 1,155 euros por título, lo que supone una subida  del 10% con respecto al de 2010.

El director financiero de Repsol se refirió, asimismo, al panorama en el que se ha movido la empresa en el pasado año, con aspectos tan negativos como la interrupción de las operaciones en Libia o los efectos en YPF de las huelgas de Argentina y la inflación. Este ejercicio ha comenzado con la resolución de los problemas en el país norteafricano, pero con más dudas en la filial andina, tema que ha tenido una repercusión negativa en Bolsa.  Tampoco ayer los inversores recibieron con entusiasmo los datos de la compañía que preside Antonio Brufau.

Repsol ganó 2.193 millones de euros en el pasado año. Esta cifra es un 53% inferior a la obtenida en el ejercicio precedente, aunque se trata de años poco homogéneos para ser comparados. En 2010 se contabilizó la operación con Sinopec en Brasil, por lo que sin extraordinarios, la caída del resultado habría sido del 7,9%.

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