Las constructoras lograron mantenerse en beneficios (a excepción de Sacyr Vallehermoso) pese al parón que la construcción registra en España, gracias a los contratos que logran en el exterior, a la diversificación de sus negocios y a la venta de activos.
Pese a la atonía de la actividad constructora en España, su fuerte presencia en el exterior propició que la facturación de estos seis grupos creciera un 22,6% durante el pasado año, hasta sumar 63.137,4 millones, según datos de las compañías.
Por beneficios
Ferrovial lidera el ranking del sector por beneficios, con ganancias de 1.269 millones de euros tras vender parte de su participación en el grupo británico de aeropuertos BAA.
Después se sitúa ACS, con un resultado de 962 millones, tras consolidar a Hochtief, y OHL, que ganó 223 millones, gracias a la actividad internacional y las concesiones. De su lado, Acciona logró un beneficio de 202 millones el pasado año, impulsado por su negocio de energías renovables.
Sacyr Vallehermoso concluyó por contra el periodo con una pérdida de 1.604 millones por las minusvalías contabilizadas en la venta del un 10% de Repsol y otras provisiones.
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