Nos las prometíamos felices después del subidón de ayer en Wall Street, pero lo cierto es que en la sesión hemos terminado como en los malos partidos de fútbol, pidiendo la hora. El Ibex y el FTSE se han desfondado mientras el Dax ha seguido a su ritmo como si nada. El CAC, entre dos aguas, no ha seguido ni a unos ni a otros, pero se ha mostrado solvente.

Lo más sorprendente del asunto es que la sesión comenzó decididamente alcista y que la subasta italiana inyectó más bríos a los mercados europeos, pero la reacción negativa a un déficit por cuenta corriente peor de lo esperado en Estados Unidos precipitó a los mercados europeos a la baja, en especial a los dos que más sensibles se muestran últimamente a las noticias negativas provenientes de Wall Street: Londres y Madrid.

Y es que para colmo de males, el adelanto de la hora americana hace que las sesiones a ambos lados del Atlántico se solapen una hora más porque Wall Street comienza una hora antes según la hora europea, por lo que los mercados más sensibles han tenido tiempo de hace toda la caída al unísono con los índices americanos.

Lo peor es que en el arranque previo, Wall Street se había marcado una nueva subida que, en cambio, ni el FTSE ni el Ibex reflejaron. Eso sí, la caída, íntegra. A la hora de escribir estas líneas al otro lado del Atlántico los índices emprendían de nuevo el camino rumbo al norte, así que es muy posible que nos hayan hecho de nuevo la del pulpo.

¿A todos? A todos no. Como en la aldea gala de Asterix, hay un índice irreductible. Cuando coge confianza, el Dax es el índice más poderoso del mundo, aunque les pese a los americanos, como lo demuestra el hecho de que ha subido un 20,02% en lo que va de año, más que el Nasdaq Composite y que el Nasdaq 100. Y la buena noticia es que el índice alemán ha cogido confianza.

Lo que falta por ver es si esa confianza termina por trasladarse o no al Ibex español, demasiado aquejado por las dudas del capital extranjero. Ya les he dicho muchas veces que el Ibex no me vale para nada, que es un índice manipulable y que huyo de operar en el mercado español. Ahora bien, esto es siempre que me convenga y si el Ibex está haciendo ahora mismo lo que creo que está haciendo es posible que en pocos días les pueda contar que el selectivo español es un índice a tener en cuenta hoy que puede haber llegado el momento de tomar posiciones en algunas de las acciones que lo componen.

De verdad que me encantaría, porque algunos de ustedes ya me han afeado varias veces esa actitud hostil que tengo hacia el mercado español cuando en realidad no hay hostilidad alguna, sino la pura evidencia de que hay otros mercados en los que se gana dinero y aquí no merece la pena perder el tiempo.

En fin, que las cosas siguen su curso y cada uno sigue en su sitio como pueden apreciar por el resultado final de la sesión. El Dax ha subido un 1,19%, el CAC un 0,40%, el Ibex un 0,17% y el FTSE salió peor parado incluso al perder un 0,18%