El Tesoro Público ha logrado colocar 3.178 millones de euros en letras a 12 y 18 meses de este martes, con la prima de riesgo instalada por encima de los 430 puntos básicos, aunque lo ha hecho a tipos medios de interés más altos, lo que refleja que a pesar de la elevación de la prima de riesgo la demanda de deuda española no se ha resentido sino más bien todo lo contrario.

En las dos últimas subastas de deuda española la demanda se había situado en 2 y 1,5 veces la oferta, respectivamente, y en esta ocasión prácticamente se ha multiplicado por cuatro, ya que ha habido pujas por 11.930 millones frente a los 3.000 que quería colocar el Tesoro. Esta fuerte demanda ha motivado que el Tesoro haya llevado a la banda alta de las previsiones las adjudicaciones e incluso haya superado las previsiones ligeramente.

Por tramos, el Tesoro ha colocado 2.092 millones en letras a 12 meses de los 6.063 millones solicitados por los inversores. El tipo medio ha subido hasta el 2,623% desde el 1,418% anterior. El tipo de interés marginal se ha situado en el 2,738%, frente al 1,473% de la anterior subasta.

Además, ha emitido 1.086 millones en letras a 18 meses de los 4.089 millones pedidos por inversores. En este caso, el tipo medio ha aumentado hasta el 3,110% desde el 1,711% anterior, mientras que el marginal ha subido del 1,770% al 3,200%.

El Tesoro sacará este jueves al mercado una nueva emisión de bonos y obligaciones con vencimiento a 2014, con un cupón del 3,3%, y 2022, con un cupón del 5,85%, por un importe entre 1.500 y 2.500 millones de euros.

Fuentes del mercado ha destacado que a la vista del resultado de esta subasta debe esperarse que la prima de riesgo española continúe alta hasta el próximo jueves, cuando se colocará deuda a más largo plazo ya que el desarrollo de esta subasta ha puesto de manifiesto hasta qué punto es «oportunista» la elevación de la prima de riesgo española.

Estas fuentes apuestan por una relajación a partir del jueves si, como en esta ocasión, la demanda supera con mucho a la oferta de la subasta del Tesoro. «Con el dinero colocado a buenos tipos para los próximos diez años, rebajarán la presión», aseguran.