Se trata del único grupo español que ha sido precalificado e invitado a presentar oferta por las obras, a las que concurrirá a través de sendos consorcios, según informó la compañía que preside Florentino Pérez.

En concreto, ACS pujará junto con su participada alemana Hochtief por uno de los puentes, el que se construirá en el Estado de Indiana. El consorcio se completa con la sueca Skanska y la americana Flatiron.

Estas dos últimas empresas son las que se han aliado con el grupo español para intentar hacerse con el puente que se levantará en el Estado de Kentucky.

En concreto, en este último Estado pujarán por la construcción y explotación del nuevo puente sobre dicho río que forma parte de la autopista interestatal I-65, a su paso por la localidad de Louisville. El contrato contempla además la mejora de los accesos a los dos extremos de la nueva infraestructura.

En Indiana, el competirá por la construcción del puente East End Crossing, que conecta dos autopistas, la Lee Hamilton Expressway con la Gene Snyder Freeway.

Ambos proyectos se financiarán mediante un sistema mixto, que combina la aportación de recursos públicos con el capital privado que adelante el adjudicatario para ejecutar la obra, que posteriormente recuperará con el cobro de peaje a los vehículos que transiten por los puentes.

En cuanto los fondos públicos, el Estado de Kentucky aportará 536 millones de dólares (unos 408 millones de euros), mientras que el de Indiana contribuirá con otros 432 millones (unos 328 millones de euros).