El acceso al empleo se desplomó entre enero y abril, según las conclusiones de un estudio elaborado por Fedea a partir de datos de la EPA. Según el grupo de economistas, impulsor del llamado ‘contrato único’, las tasas de acceso al empleo son las más bajas desde el inicio de la crisis y revelan un parón “muy preocupante” de la actividad económica. Lejos de suavizarse, el atasco a las puertas del empleo parece incrementarse.

Fedea elabora este estudio a partir de los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA). Para medir la pérdida de empleo, la economistas se fijan en la situación de cada encuestado a lo largo de seis trimestres. Esta evolución individual se recoge en la EPA en un apartado denominado Estadísticas de Flujos de la Población Activa.

Los economistas ponen cifras al parón en el acceso al empleo. En ese período, tan solo 15 de cada 100 empleados accedieron a un empleo, frente a los 20/21 que lo hacían tres meses atrás. La Semana Santa tampoco es excusa. Si se comparan las cifras con las del año pasado, cuando las condiciones estacionales “coinciden plenamente” con las de este trimestre, el resultado es el mismo. Una caída en porcentaje del 33 por ciento en el acceso al empleo.

“No parece observarse ningún dato que permita vislumbrar cierto repunte de la actividad”, afirman. “Más bien seguimos en una atonía muy preocupante”.

Tampoco mejoran los datos si hablamos de pérdida de empleo. Entre enero y marzo, cinco de cada cien trabajadores perdieron su empleo. Una situación similar a la vivida en el último trimestre de 2011. Sin embargo, la cifra empeora sensiblemente -un 40 por ciento- si levantamos la vista al compararla con la del primer trimestre del año pasado.

Las mujeres son las más perjudicadas en cuanto a la pérdida del empleo, así como los jóvenes, los inmigrantes y los trabajadores menos formados.

“El factor más determinante para entender quién está más expuesto a perder su empleo es la temporalidad”, apuntan desde Fedea. En iguales condiciones, la probabilidad de perder un empleo de un trabajador con contrato temporal frente a otro indefinido es casi 6 veces superior. Una diferencia que, lejos de disminuir, aumenta cada trimestre.

En su última edición, la EPA señaló que el nivel de ocupación descendió en 374.300 personas en el primer trimestre de 2012. Entonces el número de ocupados ascendía a 17.433.200 ocupados, casi un 4 por ciento menos que hace un año. En ese periodo la población activa bajó en 8.400 personas, el número de parados aumentó en 365.900 personas y alcanzó un total de 5.639.500 desempleados, un 24,44 por ciento de la población activa.