Si Artur Mas dejó claro que los nuevos recortes de 1.500 millones que esbozó el martes antes de concretarlos en el Parlament es una “imposición del Gobierno central” al tiempo que dejaba medianamente claro su escepticismo sobre la efectividad de las medidas que para España promueve el equipo económico de Mariano Rajoy, hoy el portavoz Francesc Homs justificó la necesidad de reducir el déficit recortando el presupuesto dado la disminución de ingresos que recibe la Generalitat asegurando que “esta tercer recorte no estaba prevista, pero la hemos tenido que hacer” y llegó a asegurar en referencia a la situación de Grecia que “no tenemos ganas que esto se acabe repitiendo en Catalunya, pero tenemos muchos números  porque acabe pasando”.

Insistió que las medidas tomadas por el Govern “no garantizan que sean suficientes para conseguir el objetivo de déficit fijado “porque con los tiempos que corren y con dos de frente nunca se puede cerrar la puerta a nada” .