La empresa aeronáutica europea EADS, matriz de Airbus, ha presentado el balance del primer trimestre con unos beneficios de 133 millones de euros frente a unas pérdidas de 12 millones del mismo periodo del año precedente. Unos resultados que dan un giro sustantivo en la foto de la empresa, pese a que ha tenido que destinar 158 millones por los problemas surgidos en las alas del avión A380. En su intervención para presentar los datos de los tres primeros meses, el director financiero, Hans-Peter Ring, manifestó que el grupo ha tenido que poner en marcha una operativa para solucionar las grietas encontradas en parte de estos aparatos y que son más complicadas de lo que se preveía.

No será ésa la única carga en las cuentas de EADS por los problemas surgidos en el A380, ya que queda por negociar compensaciones con las compañías aéreas afectadas. No obstante, el mensaje lanzado este miércoles ha sido positivo y se ha reiterado, en parte de cara a su competidor Boeing, que se sigue adelante con este modelo, y que éste forma un punto básico de su estrategia en el área comercial. Por ello, el grupo ha decidido introducir cambios en el sistema de montaje y modificar la aleación de las abrazaderas. Esta revisión se empezará a poner en marcha este año, por lo que los primeros aviones con las alas revisadas comenzarían a entregarse en año y medio.

Además de elevar los ingresos un 16% hasta 11.400 millones de euros, el consorcio europeo presenta otros datos que muestran que la crisis no le está pasando una pesada factura. La cartera de pedidos de EADS se eleva a 526.178 millones de euros, de los que 51.913 millones corresponden al área militar. En este contexto, la empresa indica que los pedidos de la aviación civil se mantienen y que se percibe un comienzo alentador en la demanda institucional y de defensa.