La vicepresidenta explicó tras el Consejo de Ministros que la valoración se realizará en dos fases. La primera será una prueba de esfuerzo a la que se someterá a las entidades y que se llevará a cabo en el mes de mayo. La segunda fase del proceso consistirá en un análisis más pormenorizado de los balances de las entidades financieras. Los costes de la auditoría corresponderán al Banco de España, agregó.

La vicepresidenta explicó que esta auditoría a la banca española es independiente de la valoración que Economía ha encargado a la firma estadounidense Goldman Sachs sobre los activos de BFA-Bankia de cara a la articulación de nuevas ayudas públicas para el cumplimiento de las obligaciones de saneamiento.

La vicepresidenta del Gobierno ha reafirmado la «seguridad» de los ahorros depositados por los clientes en Bankia y sus inversiones, al tiempo que ha llamado a la «responsabilidad de todos» para lanzar «mensajes certeros» de cómo está la situación de la entidad financiera.

«Hay que llamar a la responsabilidad de todos para abordar asuntos de interés de muchos ciudadanos para que lleguen mensajes certeros de cómo está la situación y de tranquilidad», aseguró la vicepresidenta del Gobierno en la rueda de prensa tras la reunión del Consejo de Ministros. Para defender el mensaje de tranquilidad, Sáenz de Santamaría señaló que el actual Gobierno ya ha acometido dos reformas del sistema financiero que elevan las provisiones necesarias por el riesgo inmobiliario a 84.000 millones de euros. Y aseguró que estas exigencias persiguen garantizar la solvencia y la capacidad de las entidades financieras para cumplir con sus obligaciones, con el fin de despejar las dudas sobre el sector.

Preguntada sobre si el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, debería comparecer en público para explicar los planes para reflotar Bankia y tranquilizar a los clientes bancarios, la vicepresidenta se limitó a decir que lo «importante» es que se acometan las reformas «necesarias».