Ante el escándalo suscitado por el hecho de que un grupo que ha perdido 3.318 millones de euros y que requiere 19.000 millones de dinero público adicional tenga que pagar 13,9 millones a un directivo por irse, el consejo de administración de Bancaja, integrada en el grupo Banco Financiero y de Ahorros/Bankia, ha planteado a éste, Aurelio Izquierdo, la revisión de los acuerdos existentes para su prejubilación y jubilación, “propuesta que ha sido aceptada con plena disposición por su parte”.

Aurelio Izquierdo, mano derecha del presidente de Bancaja y del Banco de Valencia, José Luis Olivas, en el momento de la integración en BFA/Bankia, fue nombrado director comercial de Bankia. Por ello, en la memoria de BFA correspondiente a 2011 aparecen unos derechos consolidados de 13,9 millones, pero son compromisos de Bancaja, no del grupo ni de Bankia.

Bancaja tiene compromisos con Izquierdo, que el 13 de octubre de 2011 causó baja como director comercial de Bankia, por 7,63 millones de euros en concepto de póliza de aportación definida que cubre la contingencia de jubilación, fallecimiento e invalidez. Más otros 6,28 millones en un seguro de ahorro individual para cubrir la opción de que, «bajo determinadas circunstancias», opte por la prejubilación.

El consejo de administración de Bancaja precisa, sobre los derechos vinculados a la prejubilación y jubilación de su director financiero, que “se trata de aportaciones realizadas a una entidad de previsión y que traen su origen en el contrato suscrito con motivo de su nombramiento como director general en septiembre de 2007, estando completamente cubiertas y devengadas dichas aportaciones desde 2010, y no suponiendo, por tanto, ninguna obligación ni desembolso adicional a la entidad”.

También señala que “al estar vinculados dichos derechos a situaciones de prejubilación o jubilación, Aurelio Izquierdo, actual director financiero, no ha ejercido ninguno de esos derechos ni ha cobrado importe alguno” de esos 13,9 millones.

Y que, “sin perjuicio de todo ello, el actual consejo de administración de Bancaja ha planteado a Aurelio Izquierdo la revisión de los acuerdos existentes, propuesta que ha sido aceptada con plena disposición por su parte”.

Fundación de carácter especial

Al mismo tiempo que trata de atenuar el escándalo suscitado por los 13,9 millones de euros de su director financiero, Aurelio Izquierdo, el consejo de administración de Bancaja ha acordado por unanimidad, en su reunión de esta tarde en Valencia, nombrar a José María Mas Millet como presidente de la entidad.

“Mas Millet asume la presidencia con los objetivos prioritarios de transformar Bancaja en Fundación de Carácter Especial, dando cumplimiento a la obligación legal que se derivará de la sustancial reducción que previsiblemente sufrirá su participación accionarial en el Banco Financiero y de Ahorros”, explica un comunicado de la entidad.

Su otra misión será lograr que “la nueva institución nazca con la financiación necesaria para garantizar la continuidad de la Obra Social de Bancaja, con su relevancia y repercusión social en la Comunidad Valenciana”, según ha expresado el ya presidente a los miembros del consejo de administración.

Sustituye a Antonio Tirado, que era vicepresidente de Bancaja hasta que la renuncia de José Luis Olivas le hizo asumir el cargo con carácter transitorio.  José María Mas Millet (Valencia, 1953), licenciado en Derecho por la Universitat de València, ha sido vicepresidente segundo de Bancaja desde enero de 2010. Ocupó asimismo la vicepresidencia del consejo de administración de la entidad entre 1996 y 1999. Antes fue consejero de los bancos Zaragozano y Popular. Ha sido secretario general y del consejo de Telefónica entre 1997 y 2001, con responsabilidad en las áreas jurídica, de intervención y auditoría interna.

El consejo de administración de Bancaja ha acordado también la incorporación de Francisco V. Gregori como consejero. Y ha aprobado la convocatoria de asamblea general ordinaria de la entidad para el 27 de junio en Valencia.