¿Cómo interpretar el balance de una entidad financiera?

05/06/2012

Lucía Martín. Están de actualidad: dudas, riesgos, nacionalizaciones… Le contamos en qué fijarse cuando analice el balance de un banco o caja y cómo aparecen reflejados en él sus inversiones.

En el ojo del huracán: ahí están ahora las entidades financieras españolas. Y muy a pesar de banqueros y de políticos de cualquier ideología, al señor de la calle le genera cierta intranquilidad todo ese runrún sobre los bancos y cajas de ahorro. Por eso le vamos a explicar cómo interpretar el balance de una entidad financiera, que nada tiene que ver con el de una compañía de otro sector.

Si mirase el balance de una compañía y viera que tiene una estructura de deuda/recursos propios de 15 veces, pensaría que esta a punto de quebrar. En cambio, si se ve un banco con esa estructura de apalancamiento cualquier analista diría que está ante un balance fuerte. Los inversores tienen que ser conscientes de dónde está su dinero dentro de los balances de los bancos, es decir, no está igual de seguro el dinero de un inversor que tiene un depósito que el de otro que tenga acciones de la misma entidad.

¿Cómo funciona el balance de un banco? “Dependiendo del producto que tengamos contratado podemos situarnos dentro o fuera de su balance”, comenta Borja Durán, de Wealth Solutions (www.wealthsolutions.com). “El pasivo, por ejemplo, en una compañía son sus deudas con terceros, mientras que en un banco las hipotecas de los clientes están en el activo, porque son inversiones de la entidad”, añade.

Por ejemplo, el inversor que tiene un depósito en el Banco A está situado dentro del balance del banco en el pasivo. “Además, tiene una protección extra del Fondo de Garantía de Depósitos, FGD, que, ante una insolvencia garantizaría, en teoría, hasta 100.000 euros por entidad financiera y titular. Esta protección sólo afecta a importes en cuentas corrientes y depósitos a plazo”, explica Durán.

Otro inversor que tenga en cartera un Bono del anterior banco también estaría dentro del balance, en la parte del pasivo, pero sin la protección del FGD. “En caso de quiebra del banco el bonista se pondría “a la cola” de los acreedores del banco y dependiendo de la calidad del bono que tenga (orden de prelación) cobrará antes o después en la fase de liquidación del banco. La deuda senior es la de mayor calidad y son los inversores que antes cobrarían, mientras que la deuda subordinada, convertible o preferente es deuda de menor calidad y posicionada por debajo en el orden de prelación. Los últimos en cobrar son los accionistas (las preferentes van justo antes que las acciones)”, detalla Durán.

Otra opción más segura y a la que no le afecta la quiebra de la entidad sería un fondo de inversión del propio banco (independientemente de en qué activos invierta el fondo), lo que dejaría al inversor fuera del balance de la entidad. “Este fondo de inversión pertenece a la gestora de fondos del banco, una inversión no cotizada del banco que está fuera de su balance, es decir, “a salvo” en caso de quiebra. La gestora es una entidad jurídica distinta al banco, aunque en muchos casos compartan hasta el nombre. Si quiebra el Banco A y un inversor tenía el fondo “Banco A – Bolsa Europea”, el inversor seguirá siendo el titular de unas participaciones de dicho fondo y al estar fuera del balance no le afecta la quiebra”, explica.

En el supuesto proceso de liquidación del Banco A, éste venderá su gestora de fondos a otra entidad financiera y sus fondos seguirán funcionando con normalidad. “En el caso de la quiebra de Lehman Brothers, el banco Nomura compró la gestora de fondos y los inversores de Lehman no perdieron su dinero mientras que los que tenían Deuda de Lehman o algún estructurado respaldado por un Bono de Lehman se tuvieron que “poner a la cola” para intentar recuperar parte de su inversión”, detalla.

Como inversores debemos ser conscientes de dónde están nuestras inversiones e intentar protegernos o asumir un riesgo acorde a nuestra situación.

¿Te ha parecido interesante?

(Sin votos)

Cargando...

Aviso Legal
Esta es la opinión de los internautas, no de diarioabierto.es
No está permitido verter comentarios contrarios a la ley o injuriantes.
Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios que consideremos fuera de tema.
Su direcciónn de e-mail no será publicada ni usada con fines publicitarios.