Montoro dice que hay «un problema de acceso a los mercados», pero niega que se vaya a pedir ayuda

05/06/2012

Maite Vázquez del Río. El G-7 está buscando una solución conjunta para España y Grecia, mientras los alemanes recomiendan al Gobierno español a pedir un rescate de las entidades con problemas con fondos europeos.

Las alarmas se han desatado a lo largo de la mañana del martes, cuando el ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, confesaba que el país “tiene un problema de acceso a los mercados”, una frase que inicialmente se interpretó como que se empezaba a pedir ayuda desde el Gobierno para sanear el sistema financiero, pero que tuvo que ser desmentido pocas horas después, asegurando que este reconocimiento se refería a la necesidad de que haya “unidad bancaria europea” con el fin de salir de la crisis. ¿Qué relación tiene una afirmación con la otra? Alemania tampoco parece haber entendido esta justificac ión, porque está presionando a nuestro país para que pida ayuda. ¿No recuerda esta situación a lo que ocurrió en Irlanda?

Montoro insistía en la tarde del martes que el Gobierno lo único que pide es una salida de esta crisis “con más Europa”. Esta aclaración se hizo necesaria cuando los periódicos nacionales, Financial Times y Wall Street Journal abrían sus portadas digitales con la noticia de la petición lanzada por el ministro de Hacienda español.

Para restar importancia a sus palabras, Montoro recalcó que no era la primera vez que un ministro español “habla así”. Pero con la que está cayendo no es momento para malentendidos. Incluidas las previsiones de consultoras y firmas como Spiro que a las palabras de Montoro añadió que a nuestro país se le acababa el acceso a los mercados en 48 horas. A todas luces, los mercados pierden confianza.

Una confianza que los representantes del G-7 buscan a toda costa. Las siete principales economías del mundo aseguran que Alemania está presionando a España para que pida el rescate de su sistema financiero con dinero de la UE, mientras una fuente del grupo económico afirmaba sin tapujos que “España no quiere pedirla” porque el Gobierno es “demasiado orgulloso”. Esta misma fuente decía que “la arrogancia es fatal” en estos momentos.

¿Forma parte de este orgullo las palabras de Montoro en las aseguró que “los hombres de negro no van a venir” a España a investigarnos, porque por el tamaño de la economía española es técnicamente imposible el rescate?

Pero en el G-7 este martes se estuvo analizando en profundidad la situación que vive la economía española. El titular de Finanzas de Japón, Jun Azumi, reconoció que en la reunión se estaba buscando una solución conjunta para España y Grecia.

Tasa Tobin

Así las cosas, en la eurozona avanzan algunas de las propuestas que llevamos más de un año escuchando. La tasa Tobin se va aceptando por la mayoría de los países. Este martes le ha tocado a las entidades financieras alemanas, que deberán pagar un impuesto por cada transacción financiera que realicen. Angela Merkel ha aceptado una propuesta aceptada ya por países como Francia. La única condición que podría poner Alemania es que esta tasa se aplique en la mayoría de los países europeos.

Pero no será el único instrumento que deberá afrontar la banca europea. En la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno que se celebrará los días 28 y 29 de junio también se quiere imponer condiciones más duras a los bancos para evitar que vuelvan a ocurrir los problemas que han surgido en esta crisis. Se nombrará un ministro de Finanzas y las entidades deberán abastecer con fondos a un fondo para solucionar sus problemas cuando surjan.

Y para el crecimiento económico de la zona, el Banco Europeo de Inversiones está llamado a jugar un papel fundamental. De momento las grandes economías europeas están dispuestas a esta entidad favorezca préstamos para realizar inversiones públicas en grandes proyectos de infraestructuras con los que reactivar la economía y el empleo.

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