El ministro de Economía y Competitividad, Luis De Guindos ha cumplido con la ley del Banco de España de informar al Congreso de los Diputados (en la Comisión de Economía) del nombre del nuevo gobernador este jueves. Y, al día siguiente, el viernes el Consejo de Ministros dará su visto bueno definitivo, para que el rey proceda, según la legalidad, al nombramiento. Y la próxima semana deberá tomar las riendas de la entidad supervisora. El 10 de junio deja el sillón de gobernador Miguel Ángel Fernández Ordóñez y al día siguiente, 11 de junio acaba el plazo para que todas las entidades presenten sus planes de provisionamiento a las nuevas exigencias del pasado mes de mayo, así como planes de reestructuración y recapitalización en el caso de que alguna las necesite.

El nuevo gobernador del Banco de España deberá ser el encargado de dirigir la reestructuración de la crisis financiera y, llegado el caso, hasta el propio rescate de la economía española. De los pasos que dé y su seriedad y rigor dependerá que el país gane la confianza perdida en los mercados.

Y además deberá lavar la imagen del Banco de España, un tanto ajada desde el PP y su dedo acusador sobre el ya exgobernador, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, quien en sus muchos enfrentamientos de los últimos años también se granjeó la enemistad de los inspectores del banco central español.

La próxima semana será clave en el Banco de España. El lunes, día 11, todas las entidades deberán entregar sus informes sobre la salud financiera y los pasos que han dado o van a dar a corto plazo para cumplir las exigencias de solvencia fijadas el pasado mayo. El gobernador los deberá supervisar y controlar su ejecución, o desechar en caso de que sean poco creíbles.

Pero, además, por sus manos pasarán este mismo mes los informes elaborados por las consultoras independientes Oliver Wyman y Roland Berger, sobre el sistema financiero español para conocer a cuánto asciende el “agujero” provocado por la burbuja inmobiliaria. La cantidad resultante será fundamental para conocer si España debe acudir a Europa para pedir ayuda para sus bancos. Este informe es el argumento que da el Gobierno para tomar una decisión sobre lo que va a hacer, pese a la insistencia de Bruselas de que pida ayuda.

Y de puertas para dentro, el nuevo gobernador deberá formar un equipo de su total confianza, depurando responsabilidades por todos los errores cometidos durante los últimos cuatro años por el Banco de España, que han llevado a la situación en la que nos encontramos. Los inspectores del Banco de España ya han denunciado esos errores de bulto, y exigen que sus informes sean entregados directamente al comité ejecutivo del Banco de España, sin que pase por ninguna otra mano.