El ex líder de ICV-EUiA, la versión catalana de Izquierda Unida, ha prometido ofrecer cumplida información sobre cada uno de los viajes al extranjero que ha realizado en los últimos dos años cuando más ha apretado la crisis económica a los españoles. Las principales excusas de Rafael Ribó son que preside el Instituto Internacional del Ombudsman (IOI), y que también se ha relacionado con autoridades de prevención de la tortura, aunque quienes paguen los viajes sean los ciudadanos a través de los presupuestos que recibe la institución que preside en Cataluña.

En 2010 viajó a Rotterdam (Holanda), Grecia, Islas Bermudas, Oslo (Noruega), Estrasburgo (Francia), Venecia (Italia), Ginebra (Suiza), Viena (Austria), Italia. También ha viajado para dar conferencias a Moncton (Canadá), Cartagena de Indias (Colombia), Montevideo (Uruguay), Aguascalientes (México), Innsbruck (Austria), Portugal, Finlandia, Pristina (Kosovo), Belgrado (Serbia) y Novi Sad (Serbia). Al año siguiente, en 2011, viajó a Varsovia (Polonia) y Londres (Reino Unido). Además, Ribó estuvo en Venecia, Viena, Varsovia, Dublín (Irlanda), París (Francia), Bolonia (Italia) y Livingston (Zambia); y una de sus asesoras, en Tallinn (Estonia) y Padua (Italia) y Estrasburgo. El año pasado, Rafael Ribó también realizó conferencias en Taipei (China) y Estambul (Turquía), viajó a Buenos Aires (Argentina), Astana (Kazakhstan), Luxemburgo, Malta y Belfast (Irlanda). La suma sigue hasta contabilizar un total de 50 viajes en dos años.

Por las declaraciones que ha realizado hasta ahora para justificar tamaña actividad viajera, el Síndic de Greuges ha dicho que en sus viajes siempre ha promocionado Cataluña por el mundo. Otro argumento en defensa de su honorabilidad es que los viajes solo suponen el 0,7% del presupuesto de la institución que preside, que para este año casi es de siete millones de euros. También ha explicado que siempre se hospeda en hoteles de tres estrellas y viaja en categoría turista, excepto en los desplazamientos transcontinentales, cuando lo ha hecho en la categoría “business”.

Se da la circunstancia que Ribó ostenta un cargo público desde 1980, año en que fue elegido diputado autonómico. También ha sido diputado en el Congreso y en 1997 lideró la escisión de Izquierda Unida, fundando ICV y separándola en Cataluña de EUiA para luego acudir de nuevo juntos a las citas electorales. El mandato de Ribó como Síndic de Greuges finalizó en 2010, pero el Parlamento autonómico, todavía dominado por el tripartito, reformó la ley para que pudiera proseguir en el cargo por otros nueve años, es decir, hasta el año 2019, cuando Ribó tendrá 74 años. En ese momento, el líder de la izquierda verde y nacionalista catalán habrá estado 39 años en un cargo público.