Si puede parecer arriesgado escribir sobre una inmobiliaria y el éxito de su negocio en los tiempos que corren, imagínese ser los dueños de esa inmobiliaria.. Parece mentira que en este sector haya empresas a las que le vaya bien,  y máxime, si son pymes como es el caso.

Level (www.levelpromotora.es) es el ejemplo de que se puede seguir adelante a pesar de que vengan mal dadas. ¿Su secreto? Varios: un nivel de endeudamiento muy inferior al de la mayoría de promotores. Casas con precios ajustados. Y diseño vanguardista, pero no visto como la vanguardia al servicio del lujo sino como un valor para todos. “Creemos que hay tres factores básicos para poder construir casas en un momento tan difícil como éste: una buena ubicación de la promoción, buena financiación para el cliente final y un buen precio. Eso explica que podamos seguir construyendo actualmente”, cuentan desde la compañía que emplea a 65 personas.

La promotora, que cuenta con más de 40 años de historia a lo largo de los cuales ha entregado 120.000 viviendas, tiene firmados 14 acuerdos de adquisición de suelo para desarrollar 1.300 casas. Están centrados en el segmento de primera residencia y actualmente, tienen promociones en Málaga, Madrid, Zaragoza, Salamanca, Castellón, Badalona, etc.

¿Cómo seguir funcionando con la que está cayendo y en un sector de actividad tan problemático como el inmobiliario? “Con nuevas ideas, nuevas soluciones y nuevos conceptos. Hemos adaptado nuestro modelo de negocio a los tiempos de crisis: por ejemplo, en todas nuestras promociones tenemos el que llamamos Banco Amigo, una entidad asociada que garantiza a los clientes la financiación de la casa”, explican.

Level nació oficialmente en 1987, con la denominación de Áreas de Construcción Level, pero su actividad promotora se remonta a 1968. Cerraron 2011 con 60 millones de euros de facturación y 6 millones de resultado de explotación. Y para este año prevén crecer en facturación y beneficio. La compañía obtuvo resultados positivos durante todos los años de la crisis excepto en 2008, que realizaron los ajustes necesarios para adaptarse a la nueva situación de mercado.