La primera medida del plan de reordenación de los aeropuertos ya se ha puesto en marcha por AENA y el Ministerio de Fomento, y su materialización no superará el plazo de los dos meses.  El análisis de los aeródromos de baja utilización, los que tienen menos de 500.000 pasajeros al año, cuenta con una conclusión: se modificarán a la baja los horarios 17 instalaciones, medida en parte preventiva que intenta evitar los cierres. El recorte de los horarios se elevará de media al 64% del teórico uso actual; y de esta forma, los aeropuertos afectados pasarán de estar operativos 2.002 horas por semana a solo 725. No obstante, se podrá modificar al alza el horario en el caso de apertura de  nuevas rutas o si las compañías que los usan necesitan ampliar su oferta actual de vuelos.

Todo con el objetivo de  recortar costes y pérdidas. La reducción se logrará, asimismo, al regular con el nuevo horario otros servicios, entre los que están los de mantenimiento, limpieza o seguridad. No obstante, AENA se enfrenta ahora a  trasladar estos objetivos a la plantilla, por lo que deberá negociar con los sindicatos temas como la flexibilización de la jornada o la  movilidad de trabajadores, aunque no se descartan otras medidas.

Los aeropuertos afectados por la nueva programación del Ministerio de Fomento son los de San Sebastián, Pamplona, León, Badajoz,Valladolid, Burgos, Vitoria, Torrejón y Cuatro Vientos (Madrid), Logroño, Albacete, Huesca, Córdoba, Melilla, Sabadell y Son Bonet (Mallorca), así como los helipuertos de Ceuta y Algeciras. Los resultados del informe que corresponde a 2011 muestra que sólo diez de los 47 aeropuertos de la red de AENA son rentables. Mientras, los  afectados por este plan sumaron un Ebitda negativo (resultado bruto de explotación) de 66 millones del euros en 2011. El objetivo que se marca el Gobierno es reducir esos números rojos a la mitad.