La decisión del Consejo Europeo de permitir la recapitalización directa de la banca con fondos europeos sin que compute como deuda pública tendrá su contrapartida macroeconómica por mucho que Rajoy no haya querido reconocerlo el viernes. Los líderes europeos que se oponían a esta medida, como la canciller alemana Ángela Merkel, no han aceptado sin haber tenido que recibir la seguridad de que los países beneficiados van a hacer los sacrificios necesarios para reconducir sus finanzas públicas. El guión ya lo ha escrito el propio Consejo Europeo: subida del IVA, quitar la deducción por vivienda, etc. Todo ello en unas fechas en las que se da el pistoletazo de salida de los próximos presupuestos y con la mitad de año transcurrido. No sería la primera vez que un gobierno aprovecha el verano para aplicar medidas drásticas de ajuste ya sea recortando el gasto, subiendo impuestos o haciendo las dos cosas. ¡A agarrarse que vienen curvas! Las presiones de nuestros socios internacionales y mercados son muy fuertes.