Enagás logró un beneficio neto de 185,5 millones de euros en los seis primeros meses del año, un 7% más que en el mismo periodo de 2011. La compañía basa el citado crecimiento, por encima del objetivo del año, en su política de control de costes y por la aportación del almacenamiento subterráneo de gas de La Gaviota, así como de  la planta de regasificación de Altamira (México), que no pesaron en los resultados del primer semestre del año pasado.

No obstante, el grupo que preside Antonio Llardén no espera que se repita esta evolución para el conjunto del año, de forma que los beneficios de 2012 serán similares a los de 2011. El resultado bruto de explotación (Ebitda) superó hasta junio los 449 millones de euros, un 8,2% más que en 2011. Las inversiones realizadas por Enagás llegaron a 274,1 millones de euros, y reitera su objetivo de inversión de 550 millones de euros en 2012.  Por otro lado, la liquidez  financiera de Enagás está  en los 2.789 millones de euros, con un endeudamiento neto a junio era de 3.224,3 millones, lo que supone un ratio de apalancamiento del 62,6%.