La facturación se situó en 386,6 millones de euros, lo que representa un descenso del 3,8% respecto a 2010, un comportamiento mejor que el descenso del 6% del mercado, según destacó el grupo de restauración en un comunicado.

El resultado bruto de explotación (Ebitda) recurrente cayó un 52%, hasta 9,7 millones de euros, debido al retroceso de las ventas y a los costes indirectos del proceso de transformación del grupo, iniciado en 2009.

La inversión durante el ejercicio fue de 17,4 millones de euros, un 12,2% más, de los que cuatro millones corresponden al plan de transformación; 3,7 millones a nuevas aperturas y 1,7 millones a proyectos de renovación de establecimientos.

«La empresa asumió, desde el inicio de su proyecto de transformación, la necesidad de sacrificar resultados a corto plazo a cambio de establecer unos sólidos cimientos de cara al futuro» asegura el consejero delegado de la compañía, Enrique Francia.

Cierra la cadena Tío Pepe

El grupo cerró 2011 con un total de 340 establecimientos en España y Portugal, 15 menos que el año anterior, tras abrir diez restaurantes y cerrar 25 unidades no rentables, entre las que se encuentran todas las de la cadena de restaurantes Tío Pepe.

Grupo Vips destacó que desde el último cuatrimestre de 2011 y durante todo el primer semestre de 2012, el proyecto de transformación está empezando a dar resultados en evolución de ventas y cuota de mercado. Así, las ventas de la cadena Vips se comportan un promedio de seis puntos por encima de la media del mercado.