Además de Barcelona, flamante Mobile World Capital, algunas de las localidades más afectadas son las costeras Arenys de Mar, Castelldefels, Cambrils, Sitges, L’Escala o Gavà, que arrastran anomalías desde hace cuatro años o más tiempo. «Buena parte de los problemas que tenemos de cobertura surgen de las restricciones que incorporan las normativas locales. En muchos casos estamos hablando de regulaciones del año 2003, cuando el teléfono sólo e utilizaba para hablar y enviar mensajes, básicamente”, ha explicado el decano del Colegio de Ingenieros Técnicos y Peritos de Telecomunicaciones de Cataluña (COETTC), Ferran Amago.

El informe señala que ahora que estamos en la tercera generación de la telefonía móvil y vamos camino de la cuarta, los servicios que se ofrecen son cada vez mayores y los usuarios consultan cada vez más Internet a través de sus dispositivos y envían más correos electrónicos o descargan información a través de smartphones y tabletas, cuyo número se ha multiplicado exponencialmente.  Sin embargo “los ciudadanos ven cómo se satura el servicio o no va a la velocidad requerida», denuncia Amago. Las causas hay que atribuirlas al aumento de los servicios que se ofrecen a través de los móviles, a la extensión del uso de Internet con conexión de telefonía móvil y el considerable incremento de la población en época de vacaciones en las zonas costeras.

Esas circunstancias hacen que el nivel de señal 3G disponible se traduzca directamente a la velocidad de transferencia que puede acoger el terminal. Esto explica el porqué de esta situación, que se ha visto agravada en determinadas horas del día y que se está produciendo en los últimos años. Ante estas definiciencias, el ayuntamiento barcelonés trabaja para adaptar su Ordenanza reguladora de antenas a las necesidades que estos dos grandes retos representan. “Hace tres años que estamos trabajando con los ayuntamientos y, concretamente el de Barcelona está liderando este cambio para adecuar la normativa de la ciudad. Pensamos que producirá un efecto dominó en los demás municipios en materia de banda ancha y telecomunicaciones y, específicamente, en telefonía móvil”, explica el decano del COETTC.

Según las previsiones del colegio, la nueva normativa, que no supondrá más antenas sino más bien desbloquea la tramitación burocrática, podría ser aprobada el próximo mes de septiembre. “El freno con el que se encuentra la expansión de la cobertura, está, en ocasiones, vinculado a aspectos relacionados con las prioridades municipales y el desconocimiento sobre la implicación que las decisiones locales tienen globalmente en el tema de infraestructuras de telecomunicaciones”, ha añadido Amago.

El informe también señala que el 57 % de los municipios de Cataluña tienen problemas de cobertura móvil, lo que supone un aumento de 0,3 puntos porcentuales con respecto a julio de 2011. «La franja costera no mejora o está estancada en un retroceso. Hemos detectado que hay poblaciones que habían mejorado y los problemas de coberturas estaban solucionados y que ahora han vuelto a aparecer en la lista de puntos negros», ha subrayado el director de la Oficina Técnica del colegio profesional, Jesús Anguix. De la misma manera, Ferran Amago explica que “la multiplicación de la población en los municipios costeros durante el verano agrava más el problema ya que el acceso a las redes se sobredimensiona hasta multiplicarse por cuatro”.