La diputación permanente del Parlament escuchó las explicaciones de los consejeros de Economia y de Bienestar para explicar el impago de una parte del concierto que la institución tiene con el tercer sector. Ambos consejeros coincidieron en culpar a Madrid la actual situación de las arcas de la Generalitat, mientras Mas Colell estuvo técnico explicando que han pagado las nóminas y los servicios sociales finalistas, han tenido que aplazar pagos como los conciertos educativos y sociales, y las subvenciones, así como el pago a proveedores, alquileres, teléfonos…. “A partir de ahora confíamos que la situación se normalice, que el Gobierno central active los mecanismos pertinentes”. Constató que “son los momentos más críticos del euro, hemos visto el progresivo cierre de los mercados que nos ha llevado a esta falta de liquidez. Esto puede ser paliado por el Gobierno central, de la que nosotros somos generosos contribuyentes. Si España reclame a Europa, los catalanes tenemos más razón en reclamar a España”.

Sí que garantizó el consejero de Economía que los ciudadanos que compraron “bonos patrióticos” “cobrarán pase lo que pase”.

En cambio el consejero de Bienestar, Josep Lluis Cleríes, sorprendió a los grupos de la oposición por el tono demagógico de su intervención, llegando a justificar el impago a que “el Estado nos lleva a la asfixia económica que deriva al estado social”, al tiempo que reclamó el apoyo de todos los grupos parlamentarios por que este impago no se repita. Cleríes se deshizo en elogios a las empresas y entidades sociales por qué han seguido prestando el servicio y atendiendo a los discapacitados  aseguró que el servicio de las personas disminuidas “está garantizado”. En este momento explicó que su departamento había priorizado los pagos relativos a la atención a las personas, que representan 50 millones, y ha aplazado el cobro de otros setenta.

Como era de esperar estos argumentos no convencieron a la oposición. Muy dura estuvo la socialista Eva Granados, denunciando que la gestión de la Generalitat ha llevado a una “situación inadmisible y crítica” que ha creado alarma social. “Pedimos al Gobierno que rectifique la mayor injusticia sobre las personas más vulnerables de la sociedad” y denunció que “están jugando con el compromiso vocacional de los centros y profesionales que atienden estos centros”.

Desde el PP Pere Calvó acusó al Govern de una “absoluta irresponsabilidad” por cargar el peso de los recortes a los sectores más vulnerables. Les acusó no ofrecer n soluciones que garanticen el futuro  y puso en duda los números de la deuda de la Generalitat, y además instó a los consejeros que pongan un calendario de pago de la actual deuda y que expliquen como afrontarán los próximos pagos y criticó que ante los problemas de tesorería de la Generalitat “planta” al ministro Montoro y no acude a la reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera para tratar de buscar soluciones al problema, pero respondieron con “pataletas de niño pequeño”. Finalmente pidió que “Catalunya no se merece un gobierno que actúa con esta irresponsabilidad”.

Comedores escolares

El departamento de Ensenyament ha comunicado que los alumnos que no utilicen los servicios de restauración de los centros escolares y se lleven el almuerzo en fiambrera tendrán que pagar un máximo de tres euros para cubrir los servicios de nevera, microondas, vigilancia, limpieza, etc. Ello ha inquietado especialmente a las familias que han renunciado por motivos económicos a que sus hijos utilicen los servicios de cocina.