El sector público ha perdido definitivamente su condición de refugio donde encontrar un empleo seguro. De hecho cede ya tantos empleos como el sector privado. Aunque lo peor está por llegar, según vaticina el Avance que la patronal de grandes empresas de trabajo temporal, Agett, elabora con datos de la Encuesta de Población Activa (EPA), paro registrado, afiliación y otros índices que le permiten radiografiar el mercado laboral.

Entre abril y junio se perdieron 180.000 empleos en el sector público, un 5,6 por ciento del total. El golpe se asemeja al sufrido en el sector privado -un 6 por ciento-. Sin embargo, lo peor llegará en la recta final del año, cuando se prevé «un ajuste especialmente intenso», asegura el informe que adelanta otros datos sobre la evolución del mercado de trabajo español.

Las regiones que perderán más empleo público serán Castilla-La Mancha, Cataluña y Comunidad Valenciana. Su mala situación financiera, añade, les obliga a prescindir de más empleados que prestan sus servicios en la Administración.

Sumada a la sangría en la Administración, las malas perspectivas entre las empresas avanzan un nuevo y triste récord en la evolución del mercado laboral. Así, Agett espera que septiembre finalice con las peores cifras para el empleo en un tercer trimestre desde el inicio de la crisis.

Pero no solo las Administraciones Públicas pierden empleo, abatidas por la actual recesión, la segunda desde que comenzó la crisis. Junto a este sector, recuerda el informe, la industria, el comercio, la sanidad y el servicio doméstico cedieron en conjunto 150.000 empleos entre abril y junio. Lo que contrasta con los 80.000 empleos creados también en el segundo trimestre el año pasado.

Con estas expectativas, las empresas no se deciden a abrir la espita de la contratación. Así, el contrato a tiempo parcial, poco a poco, va ganando peso en el conjunto de la contratación.

Unos 2,6 millones de personas trabajan ya en España contratados a tiempo parcial, un 15 por ciento del total de ocupados. En el segundo trimestre, mientras los contratos a tiempo completo caían un 5,7 por ciento, los compromisos a tiempo parcial escalaban un 0,5 por ciento.

Y son cada vez más los hombres que usan este contrato parcial. Aunque la mayoría siguen siendo mujeres, cada vez son más los varones contratados con esta modalidad. En cuanto a la edad, el contrato parcial crece un 7 por ciento interanual entre las personas de mediana edad -entre 34 y 45 años-, mientras cae entre los jóvenes (-15 por ciento).

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