El Parque Natural Cabo de Gata – Níjar es uno de esos parajes naturales de visita obligada en la península ibérica. Belleza natural sin masificar. Aproveché un par de días del mes de agosto para dejar mi refugio veraniego y poner rumbo a Almería en busca de sus parajes de costa aún vírgenes, con grandes y abruptos acantilados, calas maravillosas y aguas limpias y cristalinas. Sí, todavía quedan lugares así a lo largo de nuestra geografía sin necesidad de ir en busca de los Mares del Sur. Por supuesto, su delicioso pescado y marisco fueron otro de los motivos que me llevaron a estos parajes.

Situado en el punto más suroriental de la Península Ibérica, en la provincia de Almería, a 30 km de la capital. Es el primer parque marítimo-terrestre de Andalucía y cuando te adentras en él atravesando su espectacular sierra de origen volcánico, como puede comprobarse en los muros cortados a la montaña para abrirse paso la Autopista del Mediterráneo A-7, compruebas la fuerza de la naturaleza que emergió hace millones de años de diferentes volcanes submarinos para crear esta maravilla natural: el espacio protegido marítimo-terrestre de mayor superficie y relevancia ecológica de todo el Mar Mediterráneo Occidental europeo formado por 38.000 has de gran belleza y riqueza ecológica. Asimismo, cuenta con una Zona de Especial Protección para las Aves, un Humedal de Importancia Internacional, Las Salinas del Cabo de Gata y está considerado Geoparque desde 2001.

Complejo volcánico

Dentro de los límites del Parque se encuentra una Instalación-Museo de la Casa de los Volcanes en el municipio de Rodalquilar, antiguo pueblo minero que contó con explotaciones de oro, donde, a través de un paseo geológico, se pueden conocer e interpretar los paisajes del Geoparque de Cabo de Gata a través de las 4 salas habilitadas.

Abandonando la A-7 en la salida S-471, una vez pasado el desvío a Níjar, hacia la carretera local AL- 3115 que atraviesa El Barranquete y Ruescas, camino de San Miguel de Cabo de Gata, Almadraba de Montelva y el Faro de Cabo de Gata, entre mares de invernaderos de plástico blanco y matorrales con especies como cornicabra, matagallo y palmitos. Llegaba a mediodía a San Miguel para visitar Las Salinas y el humedal sobre el que caminaban especies como flamencos, limícolas, garzas, cigüeñuelas y otras especies que habitan los limos de las marismas.

Entre San Miguel de Cabo de Gata y Almadraba de Montelva se extienden tres kilométricos playones: La Playa de San Miguel de Cabo de Gata, Playa Almadraba y la Playa de la Fabriquilla

Por fin, llego al Faro de Cabo de Gata de 1863. El mal trago conduciendo tiene la recompensa de unas vistas espectaculares del acantilado de 50 metros, desde El Arrecife de las Sirenas. Por cierto, los romanos llamaron a este lugar “promontorio de las Ágatas” debido a las piedras semipreciosas que se pueden encontrar.

Trato de llegar desde el Cabo hasta la cercana población de San José, que es el lugar más turístico de la zona, pero me informan que el camino se encuentra sin asfaltar por lo tengo que regresar por Almadraba de Montelva y San Miguel de Cabo de Gata y Ruescas en busca de Boca de los Frailes y San José.

San José de Níjar

Esta antigua aldea de pescadores es hoy un centro vacacional cuyas casas bajan de forma escalonada los cerros hasta algunas de las mejores playas de la zona como Cala Higuera, San José, Los Genoveses o las cercanas de El Monsul o La Media Luna. Sin duda que aún hay mucho que leer y muchos consejos que tener en cuenta y para ello, nada mejor que entrar en la web de los viajeros; www.viajeroshoy.com

Para seguirnos en twitter:  @diarioabierto
Para seguirnos en facebook:  http://www.facebook.com/diarioabierto