La actividad del sector privado en la Eurozona registró este mes su séptima contracción consecutiva, aunque el indicador que la mide, el PMI, registró una ligera mejoría respecto al mes pasado.
El índice elaborado por la consultora Markit tuvo una lectura de 46,6 puntos, una décima mejor que el de julio cuando los analistas habían pronosticado que no variaría. Un dato inferior a 50 refleja una situación de contracción de la actividad.
El PMI de servicios experimentó una caída de cuatro décimas al registrar una lectura de 47,5 puntos frente a 47,9 en julio, en tanto que el PMI industrial subió apreciablemente desde el 44,0 de julio a 45,3 en agosto.
La contracción es generalizada en la Eurozona, con los índices nacionales de Francia y Alemania reflejando en ambos casos lecturas inferirores a 50.
«La lectura conjunta de los datos de julio y agosto es consistente con una caída del PIB de la eurozona de entre el 0,5% y el 0,6% a final de año, aunque un sustancial rebote de los indicadores en el mes de septiembre podría hacernos cambiar esta previsión», señaló Rob Dobson, economista de Markit.
La aparición del dato del PMI hizo virar el signo de las Bolsas europeas que tras una apertura claramente alcista emprendieron el camino de las caídas.
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