Artur Mas pidió a los catalanes que se movilizaran el 11 de setiembre para respaldar su propuesta de pacto fiscal y convertirlo en un clamor a favor del pacto fiscal, aunque la convocatoria realizada por la Asamblea Nacional Catalana con la finalidad de reclamar la independencia (el lema es “Catalunya, próximo estado de Europa). Aunque muchos consejeros habían asegurado que no se sentían incómodos con esta convocatoria y daban a entender que el Govern asistiría a la misma, los últimos días varios consellers se han ido desmarcando de la convocatoria. La razón del entusiasmo inicial y la llamada a la participación al reciente enfriamiento a movilizar desde la Generalitat a la población se puede encontrar en la carta que Mariano Rajoy envió a Artur Mas el pasado 10 de agosto y responde afirmativamente la petición del presidente catalán para estudiar la propuesta aprobada en el Parlament sobre el pacto fiscal y buscar una fecha para una reunión entre los dos presidentes.

El gobierno de la Generalitat celebra este martes la primera reunión tras las vacaciones y en ella está previsto que el Ejecutivo adopte una postura colegiada sobre la actitud que han de tomar ante la manifestación. Ante las voces de algunos consejeros de plantearse asistir a la manifestación “a nivel personal”, el conseller Cleries advirtió hace unos días que no se puede desligar la condición de miembros del Govern, mientras ayer el conseller Pelegri consideraba que el Govern no debe participar en la manifestación dado que el objetivo de la misma no se ajusta a “la hoja de ruta” del actual ejecutivo.  Estas afirmaciones son un cambio de postura de la actitud adoptada por otros consejeros, como Puig, Ortega, Mascarell o Recoder, que mostraron su predisposición a asistir al acto.

La manifestación independentista ha sido contestada por diversos sectores políticos, pero ha propiciado que aflorara la división de los socialistas catalanes. Si la dirección lamenta que la tradicional manifestación de la Diada Nacional se haga con un lema que no es unitario y sólo representa a un sector de la sociedad catalana (argumento secundado por el PP), significativos dirigentes socialistas han mostrado su intención. Mientras los alcaldes de Barcelona, Lleida y Girona animan a los ciudadanos a acudir a la concentración del 11 de setiembre, aunque coinciden en que el lema “no es del todo unitario”.