El dato sugiere una relativa estabilización de la actividad en la industria china, pero hay que destacar que a pesar de la ligera mejora, aún se sitúa por debajo de la lectura del pasado mes de julio.

Los analistas de HSBC sugieren que las recientes medidas de estímulo tomadas por el gobierno chino permiten prever una relativa mejora para el último trimestre el ejercicio.

Lo más preocupante de los datos elaborados por HSBC se sitúa en el PMI de ventas, que refleja una caida a mínimos de diez meses, con una lectura de 47 puntos frente a los 48,2 de agosto, lo que indica un deterioro en las previsiones de ventas. En la misma línea, los datos relativos a inventarios se mantienen en negativo y aumentando, si bien el ritmo del deterioro parece frenarse.

Los mercados de valores asiáticos reaccionaron negativamente al dato a pesar de que sugiere una relativa estabilización.

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