La cadena de tiendas de juguetes Imaginarium cerró su primer semestre fiscal, entre el 1 de febrero y el 31 de julio de 2012, con unas pérdidas atribuidas de 4,74 millones de euros, lo que representa un aumento del 5,3% respecto a los ‘números rojos’ de 4,49 millones del mismo periodo del ejercicio precedente.

El importe neto de la cifra de negocio del grupo creció un 4%, hasta 40.039 millones de euros, impulsado por el alza de las ventas internacionales, con un avance del 15%, frente al retroceso del 4% en España, lo que supone que el negocio internacional representa ya el 46% sobre el total de la cifra de negocio.

El resultado bruto de explotación (Ebitda) es negativo en 1,52 millones de euros, lo que supone un 36% más que el resultado negativo de 965.000 euros de un año antes, debido a la estrategia de acometer un mayor número de aperturas durante este primer periodo del año, los cierres acometidos y a la disminución del margen bruto en términos relativos por la evolución adversa del tipo de cambio.

Según ha explicado la firma, la estacionalidad del negocio (que concentra la mayoría de las ventas en el segundo semestre por el impacto de la campaña navideña) hace que sea habitual la cifra negativa de Ebitda durante el primer semestre, si bien este dato se compensa «con creces» con las ventas del segundo semestre, que representan aproximadamente un 60% del total.

Por su parte, la cifra global de ventas a Precios de Venta al Público (PVP) alcanzó los 59.177 miles de euros, lo que implica un crecimiento de un 5% a tipos de cambio real. Además, el volumen de ventas PVP internacionales se ha incrementado un 23%, es decir, asciende siete puntos porcentuales.

Durante este primer semestre, el Grupo Imaginarium ha abierto 34 nuevas tiendas, mientras que en el mismo periodo del año pasado sólo se abrieron trece.

Imaginarium continúa su estrategia de incrementar el peso de las ventas de los mercados internacionales no afectados por la crisis, principalmente Rusia,  Alemania, México y Turquía, con el fin de compensar entre otros la recesión en mercados más castigados en los que la marca ha tenido tradicionalmente una mayor penetración, como Portugal y España.

El grupo, que abrirá un total de 40 nuevas tiendas en la segunda parte de su año fiscal, espera acelerar el crecimiento de las ventas permitiendo confirmar las previsiones para el ejercicio 2012, si bien la compañía reconoce que se haya condicionada por la «gran incertidumbre macroeconómica» y de consumo en mercados relevantes.