Por su parte, la directora de la Agencia Tributaria, Beatriz Viana, afirmó que esa declaración tributaria especial «está en plazo hasta el 30 de noviembre», e insistió en que hasta ese momento, no pueden ofrecer ningún dato de cómo ha sido el proceso.

En otro orden de cosas, Viana indicó que el organismo espera recaudar un 11,7% en 2013 por la lucha contra el fraude fiscal, después de ingresar 8.493 millones de euros hasta septiembre de este año, un 18,7% más que en el mismo periodo del año anterior.

Viana, que participó en la citada jornada «La fiscalidad que saldrá de la crisis: la lucha contra el fraude como objetivo de política tributaria», organizada por Deloitte, Cámara Valencia y la Confederación Empresarial Valenciana (CEV), indicó que mejorar la recaudación por la lucha contra el fraude el próximo año requerirá un «esfuerzo adicional acorde con lo que la sociedad demanda en estos momentos».

Así, reclamó a la sociedad española que se implique en la lucha contra el fraude fiscal porque «ningún esfuerzo será suficiente» sin lograr esa concienciación ciudadana, y añadió que, aunque es evidente que corresponde a la Agencia Tributaria el papel protagonista en la lucha contra el fraude, es necesario seguir trabajando en el fomento de la conciencia fiscal para asegurar el éxito de esta lucha.

Además, destacó que la Agencia Tributaria también «fomenta la relación cooperativa con empresas y profesionales tributarios, sobre la base de los principios de buena fe y confianza recíproca».

En su intervención en la apertura de las jornadas, Viana repasó las medidas adoptadas en los últimos meses, algunas en vigor y otras de inminente aprobación, como las incluidas en el proyecto de ley de lucha contra el fraude -que entrará en vigor en los próximos días tras concluir su trámite parlamentario- y la reforma del Código Penal, que eleva la pena y el plazo de prescripción para los casos más graves.

Al respecto, ha subrayado que esas medidas «van a permitir reforzar e impulsar las posibilidades de represión de los incumplimientos fiscales». En declaraciones a los medios, ha apuntado que carecen de «cuantificación concreta» porque «pretenden que el fraude fiscal no llegue a producirse», para lo que todas ellas «dotan a la administración de instrumentos potentes para mejorar esa lucha».

Esfuerzo en la lucha contra el fraude

Por su parte, el presidente de la CEV, Salvador Navarro, subrayó que el Gobierno «tendrá que hacer un esfuerzo extraordinario para dotar de medios suficientes la lucha contra la lacra del fraude fiscal», como principal causante, junto con la economía sumergida, de la caída de la recaudación en España.

A su juicio, se trata de «un problema de competencia desleal para las empresas, pero también de cultura social para los ciudadanos», quienes cree que se deben «mentalizar» de que cuando la situación lo requiere, tienen que apoyar «absolutamente todos».

La merma de recaudación supera las ayudas a la banca

Navarro reivindicó, en este sentido, que «no casa» que España sea un país con problemas de déficit, que tenga que hacer un ajuste presupuestario de 102.000 millones de euros entre 2012 y 2014 y que, en cambio, tenga un 23% del PIB en economía sumergida, es decir unos 80.000 millones de euros, «que es bastante más de lo que la banca necesitaba de ayudas».

A su juicio, como décima potencia mundial en fraude fiscal, España requiere un «compromiso firme» por parte del Gobierno en este tema, que se refleje en las partidas presupuestarias correspondientes. «No es una tarea fácil, pero abordarla con determinación es una obligación inevitable si queremos avanzar en el equilibrio de las cuentas del Estado», recalcó Navarro, quien ha ratificado el apoyo de las organizaciones empresariales al Ejecutivo en esta materia.