En la presentación de la publicación «Situación España» del BBV Research, Rafael Doménech señaló que la revalorización de las pensiones es una decisión política del Gobierno aunque su opinión es que si se adoptan, se descuenten del IPC de noviembre, que sirve para fijar esa revalorización, aquellos componentes que supongan una transferencia de rentas al exterior o al interior.

Es el caso, añadió, del componente energético de la inflación que supone una transferencia de rentas al exterior, y la reciente subida del IVA, que es una transferencia de rentas al sector público para ayudarle a cumplir sus planes de ajuste.

En cualquier caso, aseguró que lo verdaderamente importante en el caso de las pensiones es asegurar su equilibrio financiero a medio y largo plazo con decisiones como acelerar medidas previstas en la reforma del año pasado e incentivar la prolongación de la edad de jubilación.

En cuanto a la idea de que se descuente de la revalorización todo lo que suponga transferencia de rentas, el jefe de Economías Desarrolladas de BBVA Research señaló que el servicio de estudios no ha calculado cuanto supondría la subida después de esa operación porque depende de que se haga una reducción total o en parte de las citadas transferencias.

No obstante, añadió, lo que no se puede entrar es en el «círculo vicioso» de subir el IVA para asegurar el ajuste fiscal y luego las pensiones u otras rentas para compensarlo.