El Senado estadounidense reiniciará este lunes a las 11.00 hora local las negociaciones para alcanzar un acuerdo para esquivar el ‘abismo fiscal’, a 24 horas del plazo límite, según ha confirmado el líder de los demócratas en la Cámara Alta, Harry Reid.

Reid ha mantenido que republicanos y demócratas retomarán las negociaciones a las 11.00 hora local del lunes, una vez se ha cerrado la jornada de reuniones de este domingo con«diferencias significativas entre ambas partes».

«Haremos más anuncios quizás a las 11.00 de la mañana (17.00 hora peninsular española). Ciertamente lo espero», ha concluido Reid, en unas declaraciones recogidas por la cadena estadounidense CNN, al término de la reunión de más de dos horas mantenida con los republicanos por la tarde.

Por su parte, el negociador republicano, Mitch McConnell reclamaba al vicepresidente Joe Biden su entrada en la negociación, de la que se ha mantenido alejado hasta el momento.

McConnell subrayó que «deseo que todo el mundo sepa que quiero lograrlo (el acuerdo), pero necesito una pareja de baile». McConnell ha contado con reid y con el propio presidente Obama como pareja de baile hasta ahora sin que haya conseguido dar todos los pasos necesarios para completar la pieza.

Por su parte, el senador demócrata Richard Durbin ha explicado que «las conversaciones entre los líderes de las dos partes y el presidente continuarán seguro».

Durbin ha instado a demócratas y republicanos a hallar «otras formas de encontrar puntos en común» sin considerar que el resultado de las negociaciones sea «un acuerdo completo o parcial».

«La pregunta que debemos hacernos, verdaderamente, es: qué es justo, qué vamos a hacer para reducir este déficit», ha señalado Durbin. «La naturaleza de todo este proceso es el compromiso», ha apostillado.

A su juicio, si republicanos y demócratas alcanzan un acuerdo, ambas partes tendrán que seguir trabajando para consolidar el crecimiento económico y la creación de empleo.

Sobre las divergencias, Reid ha aplaudido que los republicanos hayan desistido en su demanda de recortar las ayudas a los parados, mientras que Durbin ha dicho que «entiende» que los republicanos aboguen por una «mayor clase social protegida» por la prolongación de las exenciones fiscales promulgadas por la Administración de George W. Bush más allá del 31 de diciembre.

El ‘quid’ de las negociaciones se halla en la inclusión de las clases más pudientes en dichos beneficios fiscales, como reclaman los republicanos, o de las personas con ingresos inferiores a los 250.000 dólares al año, es decir la clase media, tal y como propugnan el presidente Barack Obama y los demócratas.

De sucumbir al ‘abismo fiscal’, el 1 de enero de 2013 podrían entrar en vigor, en virtud de un automatismo, una serie de impuestos y subidas de impuestos –cuya cuantía total asciende a 600.000 millones de dólares (462.000 millones de euros)– que llevaría a la economía estadounidense a la recesión.