El presidente de Vueling, Josep Piqué, ha asegurado que si se repite una nueva huelga de controladores, el daño para la imagen internacional de España puede ser «letal».

En declaraciones a Europa Press, ha abogado por la liberalización de servicios para que no se vuelvan a repetir situaciones como ésta, y se ha mostrado preocupado por los efectos a medio plazo que la huelga pueda producir en concepto de cancelaciones de reservas, aunque ha matizado que no se podrán contabilizar las pérdidas hasta entrar en la campaña de navidad.

Ha calificado el comportamiento de los controladores de «criticable» e «inadmisible», y ha apuntado que el Gobierno actuó de forma «rápida y contundente».

Preguntado por la solicitud de indemnizaciones, Piqué ha manifestado que «no es momento para hacer valoraciones políticas» y que» lo importante ahora es reanudar la actividad».

Ha recordado que otros países vecinos como Francia también han sufrido el mismo conflicto que España con los controladores y que éste viene de lejos, por lo que «lo importante es que la situación se normalice definitivamente sin la necesidad de la presencia militar y que sirva para que no se vuelva a repetir».