La cómoda victoria del Real Madrid sobre el CAI Zaragoza (84-65) y la derrota del Caja Laboral en la cancha del Bizkaia Bilbao Basket (99-95) en el derbi vasco aúpan a los madrileños al liderato en solitario tras la disputa de la undécima jornada en la ACB.

El Real Madrid no dio ninguna opción al CAI Zaragoza en la Caja Mágica. Desde el principio del partido puso tierra de por medio con los aragoneses liderado por un gran Felipe Reyes, que logró 14 puntos, cuatro rebotes y 21 de valoración. El CAI lo intentó y mostró signos de querer apretar el marcador antes del descanso. Pero los de Ettore Messina no les dejaron acercarse.

Garbajosa, en un buen momento, fue otro de los destacados entre los locales (10 puntos y 3 rebotes). Por los aragoneses, el ex madridista Pablo Aguilar intentó guiar a su equipo sin éxito. El arranque de los blancos en la segunda parte abrió la brecha en el marcador y la superioridad madridista no hizo más que crecer hasta el final, cuando la distancia se amplió hasta los 19 puntos (84-65).

El derbi vasco entre Bizkaia Bilbao Basket y Caja Laboral comenzó bastante igualado entre ambos conjuntos, aunque fueron los visitantes los que tomaron ligera ventaja en el marcador gracias a un buen inicio de Marcus Haislip, que fue el máximo anotador de su equipo con 22 puntos.

Las diferencias, sin embargo, se ampliaron al final de la primera parte, con el Bizkaia Bilbao Basket dando la vuelta al signo del partido y ampliando las ventajas gracias a un buen trabajo, tanto en defensa como en ataque, y a la buena actuación de hombres como Aaron Jackson (26 puntos y 24 de valoración) y Álex Mumbrú (14 puntos y 27 de valoración).

El Caja Laboral, con esta derrota (99-95), deja escapar en la clasificación al Real Madrid, que ahora se coloca como líder en solitario. El Bizkaia Bilbao Basket, por su parte, se mete en la lucha por la Copa del Rey gracias también a la derrota de Unicaja.

El equipo malagueño no pudo con un Meridiano Alicante en el que el debutante Martin Rancik se echó el equipo a las espaldas. El ala-pívot eslovaco (14 puntos, 8 rebotes y 12 de valoración) lideró a los alicantinos, que obtuvieron una clara ventaja desde el principio del encuentro.

Aunque el Unicaja quiso recortar distancias antes del descanso, el Meridiano Alicante dio la sorpresa ante los andaluces, que se complican la Copa después de la victoria del Bilbao Basket.

SORPRESA EN BADALONA CON LA VICTORIA DEL CB GRANADA.

Emocionante hasta el final fue el encuentro entre el DKV Joventut y el CB Granada, en el que los nazaríes lograron su tercera victoria de la temporada, la primera fuera de casa, con el buen hacer de Robert Kurz (16 puntos y 10 rebotes).

Los andaluces, sin Gianella, jugaron en Badalona sin bases, pero con las ideas claras. Los de Trifón Poch arañaron un buen colchón de puntos en los primeros compases. Pero el DKV supo remontar antes del descanso y hasta irse por delante en el marcador.

Tras la reanudación, el partido ofreció alternativas a ambos conjuntos, aunque los de Pepu Hernández se volvieron a ver sorprendidos por un CB Granada que plantó cara en todo momento para hacerse con unos puntos muy importantes por su posición en la tabla. Finalmente, los nazaríes ganaron de siete puntos (67-74).

En Valencia, fue el Menorca Básquet quien estuvo más acertado ante el Power Electronics en el inicio, gracias a las actuaciones de Limonad y Radenovic (ambos con 16 puntos). No sólo tuvo un buen comienzo el conjunto visitante, sino que puso una buena ventaja en el marcador. Los valencianos recuperaron posiciones antes del descanso, y se situaron a dos puntos (35-37). El acierto de Víctor Claver en la línea de triples ayudó a recortar esa distancia.

El Power Electronics Valencia se vio obligado a emplearse a fondo para llevarse el partido, pero finalmente consiguió una trabajada victoria (70-63) ante un Menorca Básquet que se lo puso muy difícil. El buen partido de Rafa Martínez (con 16 puntos y 18 de valoración) motivó la remontada, aunque se marchó eliminado por faltas antes del final.

En el último partido de la undécima jornada, el Assignia Manresa cogió algo de aire al derrotar a un Baloncesto Fuenlabrada (66-54) que pese a perder varios puestos, sigue en una zona cómoda de la clasificación y se mantiene en la lucha por entrar en la Copa del Rey.

En los locales, que al final sí pudieron contar con Roger Grimau, destacaron San Miguel, máximo anotador del encuentro (15 puntos) y Gladyr, mientras que los madrileños, que fueron siempre por debajo en el marcador, echaron en falta la aportación de Batista, que se quedó en ocho puntos.