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Especialmente, ambos cuentan con la cualidad de sacar de sus casillas a los mandatarios de los países económicamente más desarrollados y con mercados más internacionalizados. Y por ello, buena parte de la opinión pública mundial se lleva una sorpresa cada vez que estos ganan unas elecciones, en el caso del norteamericano por ahora solo una, en el caso de Putin, ya van cuatro.

De los países que el centro de investigación Pew Research Center comparó en un estudio en 2017, España se encontraba entre los que menos simpatía manifestaban respecto a los dos jefes de Gobierno. En ambos casos, menos de uno de cada diez encuestados manifestó pensar que estos hacían lo correcto en el área de política internacional.