Los empresarios arremeten contra el plan de ayudas al empleo de Báñez

27/02/2013

Luis Martínez. Mónica de Oriol, presidente del Círculo de Empresarios, lamenta que el Gobierno “vuelva” al modelo de bonificaciones, letal para la competitividad.

“No más capillas”. Con estas palabras, la presidente del Círculo de Empresarios, Mónica de Oriol, lanzó hoy duras críticas a la política del Gobierno en materia laboral, y en concreto, contra las ayudas a la contratación aprobadas por el último Consejo de Ministros, en la llamada Estrategia de empleo y emprendimiento joven. Un modelo, que según Oriol, se basa en las bonificaciones y que no resuelve la segmentación, uno de los problemas más graves del mercado laboral español.

Oriol afirmó que bonificar la contratación de determinados colectivos, como, por ejemplo, los menores de 30 años, incentiva un modelo económico en el cual los empresarios prescinden de sus trabajadores al cumplir esa edad, para seguir beneficiándose de esas ayudas.

Este modelo, según algunos expertos, fomenta la especialización de la economía española en actividades de poco valor añadido, lo que condena al país a sufrir nuevas crisis de empleo como la actual, en la que se ha alcanzado una tasa del 26 por ciento de paro, con 6 millones de parados.

En su lugar, los empresarios, que presentaron este miércoles en Madrid un documento con un programa de reformas “urgentes”, titulado ‘Crecimiento económico desde la perspectiva de la empresa española’, reclamaron al departamento que dirige la ministra de Empleo, Fátima Báñez, que simplifique las fórmulas de contratación, entre otras medidas.

“Apoyamos las reformas del Gobierno”, matizó Oriol, quien, no obstante, pidió al Gobierno presidido por Mariano Rajoy “valentía” para abordar una serie de reformas que favorezcan la internacionalización de las empresas españolas, la única vía que el estudio del Círculo vislumbra para reforzar la salida de la crisis y el crecimiento de las empresas.

Entre los elogios, Oriol aplaudió el trato de favor hacia el convenio de empresa introducido por la reforma laboral, y su descentralización de la negociación colectiva. Sin embargo, la presidente del ‘centro de pensamiento’ empresarial lamentó que la reforma laboral ha dejado sin resolver problemas como el de los subsidios y la citada segmentación de la población empleada.

La presidente del Círculo de Empresarios reclamó al Gobierno que acabe con la prestación por desempleo “incondicional” en España. “Si se condicionara a la búsqueda efectiva de empleo, seríamos como los países nórdicos”, destacó, reclamando que se obligue a los desempleados a reciclarse, si quieren cobrar ayudas del Estado.

Un plan que señale a los “funcionarios redundantes”

Los empresarios insistieron además en alguna de sus reivindicaciones históricas, como la reducción del tamaño de la Administración Pública. Así, en el mismo marco, el secretario general del Círculo, Antonio Oporto, pidió a Rajoy que elabore “un plan de redundancia de servicios” públicos. Una vez hecho esto, añadió, pidió además un segundo plan de funcionarios “redundantes”.

En esta línea, Oriol pidió al Estado que se retire de sectores como la hostelería, la intermediación laboral que realiza el antiguo Inem, y la prestación y gestión de los servicios sanitarios públicos. En este último caso, esgrimió además informes que indican que, “a igual tratamiento”, el sector privado consigue un 30 por ciento de ahorro respecto al público.

Lucha insostenible contra el déficit

Los empresarios exigieron también al Gobierno un giro en su política de consolidación fiscal. Oporto, quien se felicitó por el control del déficit público del 6,7 por ciento en 2012 anunciada hoy por Rajoy, afirmó no obstante que el actual modelo de ahorro fiscal no es sostenible a medio plazo, al basarse en subidas de impuestos y recortes como el de la paga ‘extra’ de los funcionarios.

En su lugar, el Círculo abogó por una reducción selectiva del gasto público. Así, el encargado del estudio, Alberto Terol, reclamó más inversión en algunas áreas, como la Justicia, “claramente infradotada”, dijo, y una “reducción significativa” del gasto público en otras áreas improductivas.

El valor de la innovación

Terol abogó además, entre otras medidas, por un mayor énfasis en la innovación, y no tanto en centros de investigación ‘pura y dura’. Según dijo, hay empresas españolas que están logrando exportar con éxito gracias a modelos basados “en la innovación en los procesos” empresariales.

Además, Terol clamó por mejorar la enseñanza de idiomas y aprendizajes básicos como matemáticas y el uso del lenguaje, ya desde la educación infantil, y potenciar a su vez figuras como las del aprendiz y los contratos en prácticas, en el área de secundaria, mientras abogó por elevar el grado de exigencia en la Universidad.

En el apartado cultural, Terol lamentó que España carece de un proyecto “ilusionante” y “cohesionado” como país, a diferencia de otros socios de la UE donde se percibe “cierto orgullo” por la calidad de los productos manufacturados allí. “Queda mucho por hacer”, concluyó.

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