Si no fuese porque hay más de seis millones de parados, predicen casi otro millón más y dan por perdida la legislatura tirando la toalla apenas un año después de su investidura, hasta tendrían gracia por disparatados. Y por guasones. Que digo yo que éstos que nos gobiernan en vez de ser tan camaleónicos e ingeniosos para camuflar desatinos y desastres tirando de retranca, podrían emplearse con idéntico ahínco para sacarnos del abismo, solucionando los gravísimos problemas que atraviesa España.  Sin acritud: simplemente es que soy muy fan de llamar al pan, pan y al vino, vino; al ladrón, ladrón y al inútil, inútil. Por eso quizá nunca podré formar parte del pelotón de los embusteros. Huy, perdón, en qué estaría pensando… de la cuchipandi de estadistas partidistas patrios (léase: eufemismo al revés).

Esto no es una subida de impuestos, es una novedad tributaria. Y usted no debería  ejercer como ministro, ni desde luego es un hombre que se vista por los pies. Tratar de estúpidos supinos a sus gobernados, despreciar la inteligencia de los españoles le deshabilita para el cargo. Entre otras muchas cosas.

Esto no se trata de una emigración obligada de la juventud por falta de oportunidades (y por una tasa de desempleo cercana al 60% en este colectivo), es una movilidad exterior. ¿Y usted tiene el cuajo de ser ministra de Empleo? Una mujer que el ÚNICO trabajo que ha desempeñado en su vida laboral se lo ha regalado la formación política a la que se debe.

No aprobamos recortes en Educación y Sanidad, sino reformas estructurales necesarias. Lo dice el mismo que prometió crear empleo y bajar impuestos en período electoral. Señor Presidente, ¿qué legitimidad tiene un Gobierno que incumple su programa electoral? Pues eso.

Nos encontramos ante un finiquito diferido en forma de simulación, carece de traducción  -éste y otros sinsentidos similares, han desterrado a la Secretaria General a un paripé por la China comunista-. Bueno sí, podríamos denominarlo tomadura de pelo sin parangón al ciudadano. A  Bárcenas&Cía los pillamos trincando millones a diestro y siniestro, pero ¡viva el vino! Se acogen a las medidas excepcionales para incentivar la tributación de rentas no declaradas y aquí paz y después gloria. En cristiano, a la amnistía fiscal con la que se premia a delincuentes mientras que el contribuyente honrado es castigado con una tributación confiscatoria.

¿Y qué me dicen de los procedimientos de ejecución hipotecaria? Lo que viene siendo un de patitas en la calle y cargando con las deudas acumuladas: vamos, un desahucio de toda la vida.

Desindexación de las pensiones: más fango, tedio y confusión tras el último Consejo de Ministros. Hablando en plata señores, que vayan pensando en una buena planificación financiera, en depósitos o en planes de pensiones, que de aquí a unos años una vida entera de trabajo no habrá servido para nada. Bueno sí, para que una pandilla de caraduras hayan vivido a cuerpo de rey mientras arruinaban un país.

Miembros del Gobierno de España: cada vez que recurren a florituras del idioma español para evitar marrones, cada vez que eluden responsabilidades en vez de mirar a la cara a los ciudadanos, cada vez que disfrazan de retórica la cruda realidad, cada vez que disparan vileza dialéctica para rehuir la verdad, hunden un poco más su ya desprestigiada imagen, que yace enterrada junto a la credibilidad de la casta política. Y si gustan de permanecer instalados en la arrogancia del menosprecio hacia los españoles, echen un vistazo a la prensa internacional (obviamente los que dominen idiomas en el Ejecutivo: se pueden contar con los dedos de la mano). También se chuflan de ustedes ironizando sobre sus eufemismos recurrentes para escaquearse: “Tú dices tomate, yo digo rescate” llegó a titular la revista Time.

Twitter: @CarmelaDf