En la primera presentación de resultados realizada al alimón por Ángel Cano, consejero delegado del BBVA, y Jaime Sáenz de Tejada, nuevo director de Estrategia y Finanzas, con algunas intervenciones de Cristina de Parias, que se estrena como directora de España y Portugal, el principal mensaje fue la exigencia de “seguir profundizando en las reformas”, especialmente en la laboral “porque todavía tiene recorrido”, para crear empleo.

Cano exige no caer en la «complacencia» y considera “importante” que se mantenga “un espíritu reformista”. También reclama una reforma fiscal que favorezca el ahorro y la inversión. Y reclama que se reduzcan las cargas en la creación de empleo, lo que se compensaría con una mayor recaudación vía consumo.

El consejero delegado del BBVA manda también un mensaje al nuevo presidente de la patronal bancaria AEB, José María Roldán, a quien pide que trabaje para «recuperar» la imagen de la banca, maltrecha por la crisis económica. El deterioro se debe, en su opinión, a “algunas, afortunadamente no a todas, cajas de ahorro», por su mala gestión y por necesitar ayudas públicas, porque los bancos no han recibido ni un euro del Estado. «Hay que trabajar para recuperar la imagen de los bancos injustamente deteriorada cuando no han recibido ayudas públicas». También aplaude la gestión y la vuelta a los beneficios de Bankia, porque ayuda a recuperar la confianza en el sector financiero.

También hubo un mensaje para el Banco de España. Frente a la preferencia del supervisor español, compartida por el Banco Central Europeo, por el dividendo en títulos, el BBVA quiere al menos un 40% en ‘cash’. Curiosamente, los accionistas del BBVA, como los de otras entidades, se inclinan claramente por cobrar el dividendo en títulos.

La ‘guerra’ de las pymes

El cuarto mensaje está ligado a la ‘guerra’ desatada entre los bancos por las pymes. Horas después de que el consejero delegado del Popular, Francisco Gómez, dejara muy claro que una de cada cuatro empresas españolas trabaja con la entidad y que pese a la ofensiva de la competencia habían captado 18.826 pymes en el trimestre, su homólogo del BBVA anunciaba que se pone a disposición de las empresas 100.000 millones de euros en nuevo crédito. De esta cantidad, que incluye refinanciaciones, 30.000 millones irán a las pymes.

Cristina de Parias aporta más datos: 85.000 empresas captadas durante la crisis, y el objetivo para este año es añadir otras 45.000. “Queremos reforzar la apuesta del BBVA como el banco de las empresas”, subraya.

Cano subraya que el banco no ha dejado de dar crédito durante la crisis. Y presenta el nuevo plan «como paraguas» a todas las iniciativas de préstamos a empresas y pymes que tiene el grupo, reforzando su posición en estos segmentos sin necesidad de recurrir a una campaña de publicidad, en una clara alusión a Santander Advanced, y con 300 gestores especializados.

El consejero delegado del BBVA destaca que en el primer trimestre el saldo de crédito ha aumentado el 1% respecto al cierre de 2013, algo que no sucedía desde que se inició la crisis.

Sobre los resultados, mucho esfuerzo en explicar que la caída del 64% del beneficio es por la ausencia de operaciones corporativas que sí hubo en el primer trimestre de 2013 (la venta del negocio de pensiones en América Latina y de la filial en Panamá). Cano destaca la «tendencia positiva de los ingresos recurrentes», «el claro control de los gastos, en particular en España», la caída del saldo de dudosos en 1.100 millones de euros y la reducción “muy significativa” de las entradas en mora, que dejan la morosidad en el 6,4%, el mismo porcentaje que en diciembre de 2013.

 

Inicio de la recuperación en España

Cano subraya el «inicio de la recuperación» del negocio en España, en donde la actividad bancaria logró un beneficio de 386 millones de euros hasta marzo, y que la reducción de las entradas en mora del grupo en un 25% en tasa interanual se debe en gran parte a España.

El negocio en España aporta el 14,6% de los resultados del grupo, frente al 42% de México y el 23% de América del Sur. Cano pronostica que el peso de España llegará al 28%-29% en 2015, lo que supone volver al que tenía antes de la crisis. Los países emergentes en los que está presente el BBVA estarán “por debajo del acelerón que va a tener España en los próximos dos años”. “A partir de 2015 tendrá una mayor contribución de ingresos porque el diferencial de la clientela mejorará y el stock crediticio comenzará a crecer”, argumenta el consejero delegado del BBVA.

Sobre CatalunyaBanc, «lo vamos a analizar en su conjunto, las piezas que en su momento saquen a la venta, y las iremos viendo una por una», señala Cano. Sobre Barclays España, que el BBVA «mirará» cualquier oportunidad que surja en España.