La Mutualidad de la Abogacía cree en el refranero, “a quien madruga, Dios le ayuda’, y fue la primera entidad en anunciar, el 11 de diciembre, el lanzamiento de un Plan 5, incluso antes de que la reforma fiscal que creó este producto entrara en vigor. La idea es que sus mutualistas empezaran a ahorrarse impuestos desde el primer día.

El Plan 5, que puede canalizarse a través de una cuenta de ahorro o de un seguro (pero un contribuyente sólo puede tener un único contrato), debe mantenerse durante cinco años (de ahí su nombre) para poder beneficiarse de la exención de impuestos, aunque podrá movilizarse de una entidad a otra. Las aportaciones no pueden superar los 5.000 euros anuales. El 80% de la inversión está garantizada. Y el dinero generado sólo se podrá cobrar como capital, no como renta.

La oferta de la Mutualidad de la Abogacía era, y sigue siendo, agresiva. El Plan de Ahorro 5 busca mantener la misma rentabilidad que el Plan Universal de la Abogacía, que en los últimos 10 años ha tenido un rendimiento medio del 5,55%. “La gran estabilidad de su rentabilidad tiene su base, principalmente,  en que las inversiones mobiliarias de sus fondos están hechas con criterios de prudencia a largo plazo y que los gastos sobre el ahorro gestionado, serán del 0,28% en 2014, estando muy por debajo del de otras entidades aseguradoras e instrumentos de previsión”, explican en la Mutualidad de la Abogacía.

“Con la finalidad de fomentar la cultura del ahorro entre sus clientes y que puedan beneficiarse de importantes ventajas fiscales”, el Banco Popular ha lanzado el seguro individual de ahorro a largo plazo (sialp), Ahorro Bonificado Creciente, garantizando un 2% este año. Además, ofrece una bonificación creciente que puede llegar hasta el 8% del total de las aportaciones realizadas.

Bantierra, la primera entidad aragonesa de crédito cooperativo, también ha optado por el seguro, y no por la cuenta de ahorro, para canalizar el Plan 5. La entidad, con presencia en Aragón, La Rioja, Cataluña, Madrid y Valencia, es la primera en comercializar la oferta de RGA, la aseguradora del Grupo Caja Rural, Bantierra ofrece un tipo de interés técnico del 1%, más la posibilidad de reinversión una vez vencido el plazo mínimo de cinco años. Destaca que se pueden realizar aportaciones periódicas o únicas.

El director de Seguros de Bantierra, José Luis Abadía, cree que el Plan 5 va a ser muy bien recibido, «especialmente por tratarse de un producto de nueva creación y en un entorno de tipos de interés bajos”. “Puede ser una alternativa adicional a la oferta de planes de pensiones en un momento en que la previsión social complementaria es cada vez más importante para nuestros clientes, que buscan contar con mayores ahorros al llegar a la jubilación”, añade.

CaixaBank, seguro, y Sabadell, cuenta

Entre la Mutualidad de la Abogacía y el Banco Popular y Bantierra, CaixaBank y Banco Sabadell también se sumaron al Plan 5.

El banco de ‘la Caixa’ comercializa el CaixaFuturo, un seguro diseñado por VidaCaixa, con una prima mínima de 6 euros mensuales. Está dirigido, especialmente, a personas que quieren ahorrar de forma sistemática.

La Cuenta Ahorro 5 del Sabadell fue la más madrugadora, ya que se lanzó el 2 de enero. Ofrece el 1% TAE, con liquidación trimestral. Es la primera cuenta individual de ahorro a largo plazo (cialp), la otra modalidad del Plan 5.

Mapfre ultima el lanzamiento del seguro Garantía Beneficios, con un tipo del 1,75% anual. El Santander optará por una cuenta.

AXA optará por una propuesta más compleja: un tipo anual garantizado para el 50% de la inversión, y una combinación de fondos para la otra mitad.

Ibercaja es la única entidad que, hasta ahora, ha hecho pública su intención de lanzar las dos modalidades de Plan 5: una cuenta Cialp en Ibercaja Banco, y un seguro Sialp de Ibercaja Vida, orientado al ahorro sistemático.