La ‘guerra’ desatada entre los grandes bancos por penalizar la utilización de cajeros automáticos por parte de no clientes prácticamente monopolizó la presentación de resultados semestrales del Grupo Santander (3.426 millones de euros, el 24% más que en junio de 2014, que no incluyen 835 millones procedentes de la reversión de pasivos fiscales en Brasil y que se han destinado a reforzar las ratios de capital en 0,2 puntos, hasta el 9,83%).

El Santander se suma al movimiento iniciado por CaixaBank y seguido por el BBVA (el Sabadell lo está estudiando, mientras Bankia se desmarca de la iniciativa) y cobrará a partir de octubre 2 euros a los no clientes, según anunció su consejero delegado, José Antonio Álvarez. Éste considera que es “una práctica sana” cobrar por los servicios que el banco presta, y cree “justo” transmitir costes de instalación y mantenimiento de los cajeros, especialmente a los no clientes que los utilizan.

Álvarez, que reconoce que ahora cobra unos 0,60 euros de media a la entidad emisora de la tarjeta cuando se trata de un no cliente (la comisión depende de la cantidad de dinero retirado del cajero) y es ésta la que decide si lo repercute o no en el usuario, argumenta que hay «dos servicios» cuando se saca dinero del cajero. Por un lado, el uso de la tarjeta, que tiene un coste. Por otro, la utilización del cajero, «que tiene un coste distinto de la tarjeta». «Hay un coste del emisor y otro coste del servicio. Por lo tanto son dos servicios distintos», insiste.

«Aquí lo que hay es una realidad que es una inversión en cajeros. Esto es caro, tanto la instalación como el mantenimiento. Y tiene sentido que los costes se transmitan, particularmente a los no clientes», zanja el debate el consejero delegado del Santander.

Vinculación del cliente

El Santander seguirá con la estrategia, iniciada con el acceso de Ana Botín a la presidencia del grupo, de dar prioridad a la mayor vinculación con cliente frente al aumento del balance. Álvarez subraya que “estamos muy contentos con la Cuenta 1/2/3, creemos que va bien”, pero deja muy claro no se trata de una campaña de captación de depósitos, sino de una estrategia de fidelizar clientes, y la vinculación de clientes es un proceso «largo».

En este sentido, el consejero delegado del Santander subraya que el «éxito» de este producto se podrá comenzar a medir a partir de los seis meses desde su lanzamiento, realizado el 18 de mayo.

El informe financiero del primer semestre destaca que “ya se está produciendo una mejora de los niveles de venta cruzada con los nuevos clientes” captados por la Cuenta 1/2/3. Este producto se puso en marcha en el Reino Unido hace tres años, y éste se ha ampliado a España y a Portugal.

Lo relevante, la velocidad

En esa otra pugna que parece haberse abierto entre los bancos españoles para ver quién es el más digital, sorprende la posición del consejero delegado del Santander. José Antonio Álvarez cree que, aunque la transformación digital “no es una elección”, tampoco hay que precipitarse.

“Lo relevante es a qué velocidad evoluciona el banco con los clientes en el mundo digital, porque ir demasiado rápido, forzando a los clientes no es lo correcto”, avisa. El Santander “se irá adaptando a las necesidades y a las demandas de sus clientes”, insiste.

En su opinión, “la automatización de los procesos es clave para la calidad del servicio y para la eficiencia, no sólo es reducción de costes”. Y, dentro de un compromiso de “crecimiento de costes por debajo de la inflación” que tiene el Grupo Santander, “acompasar las mejoras de productividad en el negocio tradicional y el incremento de inversiones para la transformación digital”.

Menores provisiones, pero no mayores ingresos

El consejero delegado del Santander también deja muy claro que “el mejor entorno económico se nota en menores provisiones, pero todavía no en mayores ingresos”, porque en España se está ya cerca del límite en la reducción del coste de los depósitos, el rendimiento del crédito es menor.

El director general financiero, José García Cantera, destaca el crecimiento del stock de crédito del grupo “por primera vez en 5 años”, aunque no sucede todavía en España, pese a que la nueva producción crece el 17% a empresas, el 33% a particulares y el 29% en hipotecas.

Reino Unido genera el 21% del beneficio del Santander en el primer semestre, seguido de Brasil (20%), España (16%), Consumer Finance (10%), EEUU (9%) y México (7%). Banca Comercial Latinoamérica aporta el 29%; Europa continental, el 25%; Reino Unido, el 19%; EEUU, el 8%; y Banca Mayorista, el 19%.

Álvarez resalta que el Santander está “en línea” de cumplir los objetivos fijados para 2017: la ratio de eficiencia, que debe estar por debajo del 45% dentro de dos años, está en el 46,9% (47% en 2014); la morosidad se sitúa en el 4,64% (5,19% el año pasado) cuando se contempla por debajo del 5% en 2017; una ratio del capital del 10-11% en 2017, cuando ahora está en el 9,8% (9,7% en 2014); y la rentabilidad sobre recursos propios tangibles (Rote) está en el 11,5% (11% en 2014) cuando para 2017 se exige entre el 12% y el 14%. El Santander debe crecer en crédito y en beneficio por acción  por encima de sus competidores.

En agosto, el Santander abonará el primer dividendo a cuenta con cargo al ejercicio, íntegramente en efectivo.