Radiohead con “O.K. Computer” crearon los sonidos del siglo XXI

Se reedita un icono que cumple veinte años

En la prolija historia del pop rock existen pocos álbumes que hayan representado, con tanta solvencia, calidad y unanimidad un punto de inflexión en la misma como lo hace “O.k. Computer” de los oxfordianos Radiohead. En estos días, y con ocasión de cumplirse los veinte años de su icónica existencia, se reedita con el subtítulo “Oknotok 1997 2017” y con numerosos añadidos.

A los doce legendarios cortes les acompañan tres piezas inéditas y ocho caras b de singles y todo nuevamente remasterizado desde el original de las cintas analógicas. Los formatos, los ya habituales: digital, triple vinilo y doble cd.

Y dentro, algunas de las canciones más hermosas, tristes, rompedoras, trémulas, influyentes y emocionantes que se hayan compuesto en los últimos veinte años. “No Surprises”, “Paranoid Android”, “Karma Police”, “Let Down”, “Lucky” o “The Tourist”, siguen provocando que afloren en cuerpo y alma las emociones más escondidas e intensas. La melancólica voz de Thom Yorke y la magia instrumental de la banda contribuye. Una obra decisiva e imprescindible para entender la cultura del siglo XXI.

Sello: XL. Precio: 10. Discografía: “The Bend”, “Pablo Honey”, “Amnesiac”. Influidos por: Can, King Crimson, John Martyn. Influyen en: XX, Metronomy, Lobison.

Doors: el acceso a otra dimensión

Fueron pioneros en unir poesía radical, psicodelia, pop, rock y blues

The Doors rompieron los candados de la mente de la juventud a mediados de los sesenta y lograron que esta accediera a otra dimensión al unir psicodelia, pop, rock y blues con poesía descarnada, guiños intelectuales y actitudes radicales sobre un escenario. Todo ello cristalizó en un álbum decisivo a la hora de comprender los movimientos sociales y musicales que germinaron en aquella época y que siguen inspirando la actual.

Su debut, titulado con el nombre del grupo y que provenía de una obra de Aldous Huxley sobre las puertas de la percepción, sirvió para que apareciera otra que abría caminos al rock y que lo utilizaba para llevar planteamientos osados y freudianos sobre la poesía de Rimbaud (“I Looked at You”); el blues de Willie Dixon (“Back Door Man”) o las creaciones musicales de Kurt Weill y Bertolt Brecht  (“Alabama Song”).

Y en medio de tanta ruptura y a la vez respeto por lo anterior, dos canciones para la historia no solo de la música sino de la concepción de la nueva sociedad y del sexo: “Light my Fire” y “The End”. Tan seminales como actuales. Es como si no hubieran pasado los cincuenta años que acaban de cumplir. Por ello se ha reeditado esta obra trascendental que lleva cerca de tres millones de ejemplares vendidos.

Sello: Elektra. Precio: 8. Discografía: “The Soft Parade”, “Strange Days”, “Waiting For The Sun”.

Influidos por: Robert Johnson, Weill, Kinks. Influye en: Planetas, Triana, Lagartija Nick.