Gran parte del empleo que se cree en los próximos años será cualificado. Sin embargo, la falta de jóvenes, que ocupan hasta la mitad de los puestos en los sectores más punteros, amenaza con despoblar las oficinas y fábricas más innovadoras. Un hueco que la inmigración será incapaz de cubrir, ni siquiera con la previsión de llegadas masivas, cuya precisión despierta honda controversia, tal y como recoge un estudio presentado hoy por el catedrático de Economía Josep Oliver, para la consultora Manpower, en torno al futuro del empleo y los jóvenes.

El estudio encargado a Oliver pone la lupa sobre el trabajo más cualificado – el de técnicos, ingenieros, directivos… el más abundante en un futuro inmediato – y en el “tsunami demográfico” que España vive ya a consecuencia de la caída de la natalidad durante los años 80 y 90 del pasado siglo.

La escasez de jóvenes – su peso en el empleo ha caído en quince puntos, hasta el 24%, en los últimos años – será un fenómeno que estrangule a la economía española. Y que ni la inmigración será capaz de compensar.

El Instituto Nacional de Estadística (INE) prevé la llegada de 2,5 millones de inmigrantes entre 2018 y 2028. Esta previsión es fruto de un giro brusco que el otoño pasado el INE imprimió a sus previsiones, que pasaron de las 30.000 llegadas anuales previstas a nada menos de 250.000 llegadas anuales.

“No lo creo, el mercado de trabajo en España no tiene tanta capacidad para absorber ese empleo inmigrante”, asegura Oliver.

No se cubrirán la mitad de vacantes

Aun así, Oliver ha incluido las previsiones de inmigración del INE en su modelo, que asegura que la economía española creará unos 200.000 puestos de trabajo de alta cualificación entre 2018 y 2028.

Según estos augurios, la mitad de estos puestos se quedarían vacantes, aun sobreestimando la llegada inmigrantes y su cualificación, así como otros factores, como el de la movilidad interterritorial, es decir la cobertura de vacantes de empleo con personal de otras regiones, que se ha demostrado tradicionalmente baja en nuestro país.

“Esto demuestra que tenemos un problema educativo. Lo dramático es que es un problema crónico”, advierte Oliver. En su opinión, España tiene un exceso de titulados universitarios en las rama de Ciencias Sociales, mientras que padece un déficit en las carreras y en las titulaciones Formación Profesional superior en las llamadas ramas STEM; es decir, ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas, por sus siglas en inglés.

Profesiones más demandadas

La mayoría del empleo de alta cualificación de los jóvenes procederá de la industria y los servicios. Por su parte, las profesiones más demandadas hasta 2028 serán topógrafos y diseñadores, analistas y diseñadores de software y multimedia, ingenieros, especialistas en finanzas, arquitectos técnicos y programadores informáticos.

Por su parte, el presidente de Manpower, Raúl Grijalba, y el presidente de Ericsson y vicepresidente de la Funcación I+E, José Antonio López, han reclamado un pacto de Estado por la educación, después de destacar la necesidad de adaptar la formación de los jóvenes con las necesidades del sistema productivo.

Finalmente Oliver ha apostado por modificar un proceso de llegada de inmigrantes — que se ha mostrado hasta ahora “absolutamente desordenado”, ha dicho, y adoptar modelos como los ensayados en otros países, como Canadá.