Hyundai ha decidido reforzar la presencia de su marca premium en Europa ampliando con cuatro nuevos mercados su apuesta actual. Lo ha anunciado en las 24 Horas de Le Mans, antes del debut de Genesis Magma Racing en el Circuito de la Sarthe.

Genesis no quiere seguir siendo la marca desconocida del grupo Hyundai Motor. A pesar de haber aterrizado oficialmente en Europa hace poco menos de cinco años, su hoja de ruta no ha hecho más que intensificarse. Ahora, la firma coreana de lujo anuncia su desembarco en cuatro nuevos mercados del continente, reforzando una ofensiva estratégica que va mucho más allá de vender coches: se trata de posicionar a Genesis como un actor de primer nivel en el escenario premium europeo, con el diseño, la tecnología eléctrica y el automovilismo como ejes centrales del discurso.

Tras su desembarco en Alemania, Suiza y Reino Unido, los países que funcionan como un laboratorio para toda marca de aspiraciones globales, Genesis ha decidido que ha llegado el momento de dar el siguiente paso. En 2026, abrirá operaciones en Francia, España y Países Bajos. La marca no lo hace tímidamente: llega con tres modelos 100% eléctricos, recién renovados y alineados con el ADN de la marca —elegancia atlética, innovación técnica y una experiencia de cliente coreana que se aleja radicalmente de la frialdad habitual del segmento.

El GV60, el Electrified GV70 y el Electrified G80 serán los encargados de romper el hielo en estos nuevos territorios. No son simples modelos de relleno: cada uno cumple un rol específico dentro de la estrategia de Genesis. El GV60, el primero en apostar por la plataforma eléctrica del grupo, es el SUV compacto que sirve como carta de presentación tecnológica. El Electrified GV70 apunta directamente a los clientes que buscan un SUV mediano con presencia, refinamiento y prestaciones. Mientras, el Electrified G80, la berlina ejecutiva de lujo, es el escaparate de todo lo que Genesis sabe hacer bien: calidad percibida, diseño fluido y una dinámica que sorprende por su equilibrio.

La ofensiva está liderada por Xavier Martinet, director general de Genesis Motor Europe, quien no duda en calificar este nuevo movimiento como “la expansión más importante desde que llegamos al mercado europeo”. Martinet apunta también a una dirección deportiva más marcada y a un crecimiento medido, pero ambicioso. Y no lo dice por decir.

Genesis ha querido que el escenario para este anuncio tuviera el simbolismo que requiere una declaración de intenciones como esta: las 24 Horas de Le Mans. Allí, mientras los prototipos devoraban kilómetros y la resistencia volvía a coronar a los mejores, Genesis aprovechaba para presentar en sociedad su apuesta más osada hasta la fecha: el equipo Genesis Magma Racing, que con el apoyo de IDEC Sport ya ha debutado en las European Le Mans Series con varios podios en su haber. Pero el objetivo final no está solo en el paddock: apunta a competir como equipo de fábrica en 2026, en la misma edición donde su GMR-001 Hypercar formará parte del WEC, el campeonato mundial de resistencia.

Este proyecto no es un simple ejercicio de marketing ni un brindis al sol. El GMR-001 representa una lectura radical del potencial de la marca, una apuesta de ingeniería pura que busca transmitir credenciales deportivas sin complejos en un terreno donde solo las más grandes se atreven a jugar. Genesis quiere ser una de ellas.

La electrificación sigue siendo el corazón del plan. Los tres modelos eléctricos que acompañan la expansión europea no solo aterrizarán con configuraciones mejoradas, sino también con una propuesta de valor singular: mayor autonomía, integración de las últimas tecnologías del grupo Hyundai (que lleva años jugando en la élite eléctrica) y una experiencia de cliente que se centra en el concepto coreano de “son-nim”, que puede traducirse como “querido invitado”. Aquí, cada cliente se trata como si estuviera entrando en una casa, no en un concesionario. Eso, en un continente donde la experiencia de compra premium muchas veces se convierte en una barrera de entrada, puede marcar diferencias.

Genesis aún no ha desvelado todos los detalles sobre el modelo de negocio en estos nuevos mercados. Pero si algo ha demostrado en Alemania y Reino Unido, es que no teme a los enfoques alternativos: desde ventas exclusivamente digitales hasta la entrega a domicilio, pasando por programas de suscripción o servicios posventa diseñados a la medida. La firma no quiere replicar fórmulas antiguas: quiere imponer la suya.

Y mientras todo esto ocurre, al otro lado del mundo, Hyundai Motor Company refuerza su liderazgo con un español como CEO global: José Muñoz. Su ascenso coincide con la nueva etapa de Genesis, y si algo ha demostrado Muñoz desde su etapa clave en Hyundai North America, es que sabe cómo hacer crecer una marca cuando se dan las condiciones adecuadas. En Europa, Genesis ya está poniendo las piezas sobre el tablero.

En definitiva, la ofensiva de Genesis es mucho más que una expansión comercial. Es una declaración de madurez. Ha dejado de ser la joven promesa del grupo Hyundai para empezar a jugar en serio en la liga de los grandes del lujo. La tecnología está lista, el diseño tiene personalidad, y el automovilismo está llamado a reforzar esa legitimidad que en Europa se construye no solo con buenos productos, sino también con pasión.