Asimismo, Orange ha indicado que con estos resultados continúa la «senda de crecimiento» de los últimos seis trimestres. La filial española del operador galo cerró el 2011 con un incremento del 4,5 por ciento de sus ingresos totales.

Por áreas de negocio, los ingresos en el segmento móvil ascendieron a 797 millones de euros, lo que supone un incremento del 1 por ciento -un 3,5 por ciento excluyendo impactos regulatorios-, mientras que los ingresos de la unidad fija crecieron en un 8,6 por ciento, hasta los 184 millones de euros.

En concreto, la compañía ha explicado que el crecimiento de la línea móvil se debió principalmente al aumento en la base de clientes de contrato, que ya representan un 62 por ciento del total de los clientes móviles, al uso de los servicios de datos y a la aportación de su negocio OMV (Operadores Móviles Virtuales).

En cuanto a la actividad comercial, la operadora ha cerrado este periodo con más de 13,75 millones de usuarios, de los cuales 12,46 millones son de telefonía móvil, lo que supone un 3,4 por ciento más que el pasado año, y 1,293 millones de banda ancha, lo que representa un 12,4 por ciento más.

En el negocio móvil, Orange ha conseguido 129.000 nuevos clientes de contrato, lo que supone un aumento del 6,8 por ciento respecto al mismo período del año pasado. Además, la compañía lideró el mercado de la portabilidad, con un saldo neto positivo en el primer trimestre de 110.000 clientes netos.

En banda ancha, Orange ha sumado 28.000 altas netas, hasta alcanzar los 1,293 millones clientes de banda ancha, un 12,4 por ciento más que el año anterior.

El ARPU (ingreso promedio por usuario) de los clientes de banda ancha aumentó un 2,4 por ciento hasta alcanzar los 32,7 euros. Además, Orange cuenta con un total de 814.000 clientes a los que ofrece servicio de VoIP (Voz por Internet), un 24 por ciento más que el año anterior y un 63 por ciento de su base total de clientes, liderando el mercado residencial de VoIP en España, ha apuntado Orange