Leire Pajín ha dejado clara su posición sobre los dos temas más candentes que afectan a su departamento. En Sanidad lo que hay que hacer es seguir las prácticas de ahorro interno y de pedir más esfuerzos a la industria farmacéutica en lugar de introducir el copago en algunas prestaciones mientras que mantiene su intención de poner en marcha la nueva ley de tabaco que prohíbe que se fume en lugares públicos el 2 de enero.

Pajín no ha dudado en absoluto al abordar estas dos cuestiones. Respecto a la posibilidad del copago sanitario ha señalado que “hay muchas medidas a tomar antes de iniciar ese debate” y ha puesto como ejemplo que aún se puede caminar mucho en materia de ahorro y mejora de la eficiencia del sistema sanitario. En este sentido ha recordado que con las últimas medidas adoptadas  se espera ahorrar una cifra próxima a los 4.000 millones de euros, “que no es nada despreciable”.

Pero yendo un poco más lejos ha adoptado una posición que hasta ahora ningún responsable político había tomado ya que se echaban balones fuera. Pajín ha señalado que en su opinión si el copago es simbólico entiende que no será disuasorio para evitar los actos médicos que se dice podrían no llevarse a cabo. Y, añadió, si el copago es real, es decir si se hace recaer sobre los usuarios de la sanidad el coste real o bastante aproximado de lo que cuestan determinadas atenciones, lo que ocurriría es que sería discriminatorio y muchas personas no se someterían a algunas pruebas dado su elevado coste. Y el objetivo básico de Pajín es mantener la sanidad como un servicio universal para todos los ciudadanos.

En lo que se refiere a la próxima entrada en vigor de la ley del tabaco ha reiterado que su ministerio trabaja con el calendario de que entre en vigor el próximo 2 de enero, aunque reconoce que la tramitación parlamentaria, tiene que aprobarse en el Senado y volver al Congreso de nuevo, puede dificultar ese objetivo.

En cualquier caso, se cumpla o no la fecha, lo que ha dejado claro es que espera que la ley se apruebe en línea con lo que lo hizo el Congreso y considera que algunas de las enmiendas introducidas por el Senado suponen una marcha atrás que tratará se corrija con su nueva discusión en el Congreso. Pajín señaló que tanto la OMS como diversos estudios de países europeos donde ya está prohibido fumar en los lugares públicos señalan que dicha prohibición no genera ningún problema para los establecimientos de hostelería.

Pajín recordó que en España hay más muertes al año por enfermedades relacionadas con el tabaquismo que por sida o accidentes de tráfico y que hay que distinguir entre la salud pública, que debe proteger la Administración y la decisión individual de fumar o no.

En otro orden de cosas, la ministra de Sanidad anunció que, por primera vez desde que hay estadísticas, el número de abortos practicados en España descendió el año pasado desde los 115.000 de 2008 a los 111.000 de 2009, lo que atribuyó en buena parte a la dispensación de la ‘píldora del día después’. Para la ministra, el que hayan descendido, en 500 casos, los abortos practicados a menores de 19 años es especialmente significativo.