Volkswagen podría añadir una aventurera versión a la oferta Beetle si, finalmente, se anima a producir el Beetle Dune que estos días presenta en el Salón Internacional de Detroit.

De momento, el Beetle Dune no pasa de ser un mero prototipo. Sin embargo, todo en él puede trasladarse con facilidad a la producción en serie.

Entre los «guiños» que los diseñadores han introducido figura un portaesquís en la parte superior de la zaga (casi oficia de espoiler) apto para la fijación de sendas tablas para esta modalidad deportiva de invierno, que viajan casi verticales. Semejante complemento alarga la carrocería 50 mm frente a las cotas del Beetle de serie.

También cuenta con prominentes llantas de 19 pulgadas. Todo ello confiere una poderosa estampa todoterreno propia de los VW buggies de los años 60 y 70 del pasado siglo.

Pintado en tonalidades Arizona y Amarillo-naranja, el Beetle Dune recibe extensiones y ruedas parcialmente en negro mate. El conjunto ensancha la carrocería 24 mm por cada lado, hasta un alcanzar 1.856 mm. A todo ello, mide 4.290 mm de longitud (aumento de 12 mm) y 1.536 mm de alto (aumento de 50 mm). Por su parte, el ancho de vía gana 29 mm, y así queda en 1.607 delante y en 1.573 mm detrás. Otro dato: el coche pisa sobre neumáticos de sección 255/45.

Un campero rápido

El Beetle Dune se sirve del motor de gasolina tetracilíndrico 2.0 TSI de 210 CV (10,2 l/100 km en ciudad y 8,1 l/100 km en carretera), visto en otros muchos modelos de la órbita Volkswagen, en este caso asociado al cambio auto secuencial de doble embrague DSG, de 6 marchas.

Todo ello le permite progresar entre 0 y 100 km/h en 7,5 segundos y llegar a un máximo de 227 km/h. El coche es de tracción delantera y monta diferencial electrónico XDS, que neutraliza subvirajes (tendencia a seguir recto en curva) a elevada velocidad.

Por cierto, techo solar corredizo/panorámico transparente pintado en negro brillante, sistema de infoentretenimiento con pantalla táctil de 7,7 pulgadas de tecnología AMOLED y asientos deportivos forman parte de la equipación que define al Beetle más aventurero de la nueva generación.