La legendaria marca británica le da una vuelta de tuerca a su modelo más trendy y se saca de la manga cinco versiones llenas de personalidad para abarcar a un público mucho más amplio amante de las Modern Classic

Desde la accesible Street Twin para los pilotos menos exigentes pero no exenta de entusiasmo, pasando por la Bonneville T120 y T120 Black para los más clásicos y conservadores, hasta la más dinámica Thruxton, que cuenta con una versión R que, ahora sí, es una deportiva sin complejos, las nuevas motos que componen la gama Modern Classic de Triumph componen un plantel dispuesto a copar un segmento del mercado en alza que apuesta por la personalidad y la funcionalidad para captar a un público cada vez más necesitado de reafirmar su identidad.

Hace un par de años acudíamos a la presentación de la Boneville y nos encontrábamos un ícono de las dos ruedas que con unos pequeños retoques estéticos se mantenía fiel a la esencia de un modelo apreciado por los compradores gracias a su carisma. La gama se diferenciaba por las versiones Scrambler y Thruxton, pero la realidad es que los modelos eran en esencia muy parecidos sobre la misma base de su sempiterno motor bicilindrico paralelo refrigerado por aire, y el público pide cada vez más cuidado por el detalle y más personalidad.

Es por ello que la nueva gama Modern Classic de Triumph basada en la Boneville está ahora más diferenciada, y nada más acercarse a cualquiera de los modelos se comprueba que la ingente capacidad de personalización (hay más de 160 accesorios disponibles) junto con una calidad percibida mayor y una total ausencia de vibraciones una vez arrancadas permiten pedir un extra de esfuerzo económico en la factura final.

El modelo de acceso se denomina ahora Stret Twin, pero resulta una moto más que suficiente para quien quiere un vehículo en su día a día, accesible gracias a sus 8.800€ de precio base, y divertida a la vez con sus voluntariosos 55CV. El motor es el conocido bloque de 900cc. Un peldaño por encima se sitúan las Boneville T120 y su versión Black. Perfecto homenaje al modelo fabricado por primera vez en 1959, su motor sube a 1.200cc y adopta refrigeración líquida para ofrecer un 50% más de par (105Nm). Su comportamiento es así poderoso y versátil, mientras que en su parte ciclo añade un segundo disco de freno delantero para soportar mejor el aumento de peso. Su precio parte de 11.900€.

Mención aparte merece la nueva Thruxton, el modelo deportivo de la saga. Con el mismo motor de la T120 esta versión es de inspiración 100% Café Racer y se ha trabajado sobre la entrega de la potencia (97CV y 112Nm) y sobre la parte ciclo para ofrecer un comportamiento mucho más dinámico en carretera. El culmen de esta variante es la versión R, que recurre a una horquilla invertida delantera firmada por Showa, una suspensión trasera multiajustable con el sello Öhlins, unos frenos Brembo con pinzas radiales de cuatro pistones y unos neumáticos Pirelli Diablo Rosso Corsa para mutar totalmente su personalidad y ser muy efectiva en zonas de curvas. Su precio arranca en 14.900€.

Los nuevos modelos Modern Classic de Triumph no renuncian a estar a la última en lo que a tecnología se refiere, y así pueden montar elementos como el ABS, el control de tracción, el acelerador electrónico, el embrague antirrebote, e incluso un selector de modos que conducción, que permite elegir entre Road, Rain o Sport según el estado de la carretera en cada momento. Estos cinco modelos se suman a los ya conocidos y que Triumph mantiene en el catálogo: la Bonneville (desde 8.595 euros), Bonneville T100 (desde 10.195 euros), Bonneville T100 Black (desde 9.895 euros) y Scrambler (desde 10.395 euros).